Celia Sánchez, literatura y radio
Fue nuestro José Martí quien escribiera “no se siente completo el ánimo sin algo que respetar y venerar”. Y quizá aquella profunda reflexión del Maestro me llevó de la mano un día cualquiera, en la década de los años 90 del siglo anterior, a llegar a los sitios venerables de la familia de Celia Sánchez Manduley buscando la especial vida de esta mujer que fascinó durante varias décadas al pueblo de Cuba de manera que, para muchas personas se transformó en madre, en protección amplia y profunda, en ese personaje de leyenda que nos vino desde los tiempo difíciles de la lucha clandestina contra el dictador Batista pasando por los largos meses de lucha en la Sierra Maestra donde su imagen se nos hizo leyenda entre las manos.