por Aún con las debilidades profesionales que todavía existen, nuestra radio da noticias, cuenta historias de vida y es cada vez más una plataforma de discusión y debate.
En el sistema de la radio cubana contamos con una gran fortaleza, y es que salvo algunas excepciones, la inmensa mayoría de nuestros cuadros son hombres y mujeres de radio, con gran sentido de pertenencia en el medio, quienes se formaron en la base y fueron transitando por diferentes responsabilidades.
Pero ante todo, esos cuadros son periodistas que han dedicado una buena parte de sus vidas al medio radial. Y eso da credibilidad, respeto, prestigio.
Cuando uno mira los rostros de los asistentes a la Asamblea Ramal de la Unión de Periodistas de Cuba, observa muchas caras jóvenes, pero una buena parte de los participantes ha entregado décadas de trabajo ininterrumpido a la radio, porque más allá de nuestras inconformidades, para nosotros hacer radio constituye una razón de vida. Esa fidelidad al medio radial es también una de nuestras mayores fortalezas.
No me cansaré de decir que cuando no pocos pensaron que las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones apagarían nuestro sonido, buscamos mil maneras de hacer una radio mejor y nos multiplicamos en las diferentes plataformas.
Por ello, hoy no somos solamente audio, sino texto, imágenes, sonido. Y estamos presentes con gran fuerza en nuestros sitios web, en las redes sociales, preservando nuestra razón de ser que es la calidad de la programación.
Hoy el reto está en hacer un periodismo que se parezca mucho más al país que somos y seremos, un periodismo que investigue sin trabas, que opine, que busque la polémica con ética y objetividad, donde aprovechemos la experiencia de los más veteranos, pero donde también se abran las puertas a los jóvenes, sin prejuicios.
No podemos ver simplemente como una derrota cuando un joven se nos va de la redacción, luego de que lo formamos y le dimos espacio y libertad para crear.
Creo que debemos seguir ofreciendo oportunidades y confianza a esa buena parte de los egresados que ha decidido quedarse en nuestras redacciones y están dando pruebas de talento y responsabilidad.
En las actuales circunstancias que vive el país y ante los desafíos que nos impone el año 2018, sólo pensando y creando en colectivo cada uno de nuestros medios enfrentará el reto de informar a nuestra audiencia, de ser fiel a las historias que contamos, de no dejar morir la inmediatez, de no ser ingenuos, de enfrentar cualquier tipo de manipulación mediática, desde fuera y desde dentro.
Ciertamente, más allá de las insatisfacciones, de las carencias materiales con las que chocamos a diario, de incompetencias profesionales que persisten, el país cuenta con un sistema de la radio leal y comprometido con la historia y la realidad de la nación.
El reconocimiento mayor, el cotidiano, el permanente, el más gratificante, es el de nuestro pueblo apegado a su radio; el de millones de oyentes en todo el país que confían y siguen creyendo en el periodismo radial que se ejerce en toda Cuba, perfectible y repleto de insatisfacciones, pero con la absoluta seguridad de que el mensaje le llega a nuestra gente.
Hagamos realidad lo que expresó el Comandante Fidel Castro en 1994, durante un encuentro con trabajadores de Radio Rebelde, en ocasión del aniversario 36 de la emisora: “Yo creo que no hay nada comparable con la radio en este momento”.
Nota: Intervención de la destacada periodista de Radio Rebelde durante la Asamblea de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC) de la delegación ramal de la radio, 10 de mayo de 2017, La Habana, Cuba.