Para evocar la sagrada memoria del Comandante Fidel Castro Ruz (1926-2016), y para evocar el aniversario 133 de la fundación neoyorquina del periódico Patria por José Martí, he decidido reseñar el volumen Privilegiados del tiempo, de los periodistas Ovidio Cabrera García e Irma Cáceres Pérez, publicado por Ediciones En Vivo.
Ese texto, verdadera joya del género testimonio, registra 25 anécdotas protagonizadas por el Líder Histórico de la Revolución Cubana en su interacción profesional y afectivo-espiritual con los colegas de la radio y la televisión insulares que cubrieron actividades en que el «Guerrillero del Tiempo» participara o lo entrevistaran para los medios de comunicación dignamente representados por nuestros colegas de la prensa.
Recoger esos hechos históricos, en que no solo se destaca el liderazgo político e ideología, «libre como el viento y el vuelo de las aves», que lo caracterizaran desde la vertiente personográfica, sino también su estatura excepcional como ser humano, constituye un loable esfuerzo llevado a cabo por periodistas radiales y televisivos que estuvieron en contacto con Fidel, quien en 1959 expresó: «llegamos en el momento justo […], un segundo menos y hubiéramos perdido […]».
El líder de todos los cubanos tenía la costumbre de revisar la prensa plana, radial y televisiva diariamente, así como la prensa internacional para estar bien informado de lo que ocurría a escalas nacional y global. Sus preocupaciones fundamentales eran la alimentación, la salud y la educación que debía proporcionársele al pueblo cubano.
Fidel jamás perdió el vínculo con los periodistas, ya que les concedió gran importancia a los medios y los medios a él. Fidel y los periodistas se fundieron en cálido abrazo y siempre les dio prioridad a los disímiles problemas, tanto profesionales como personales, que afrontaran nuestros colegas en el ejercicio periodístico, percibido por él como fuente nutricia de ética, patriotismo, humanismo y espiritualidad.
Afecto, cariño y respeto son los sentimientos que inspira la lectura de Privilegiados del tiempo, cuyos principales gestores fueran Cabrera García y Cáceres Pérez, quienes recogieron fielmente la ardua labor, sintetizada en ese volumen, ilustrada con fotos de todas y cada una de las anécdotas incluidas en ese libro, y desarrollada –básicamente- desde una óptica objetivo-subjetiva por los colegas de la prensa radial y televisiva que tuvieron el privilegio histórico de trabajar muy cerca de Fidel.
De acuerdo con la doctora Norma Gálvez, directora de Ediciones en Vivo, dicha obra se estructuró por orden alfabético, y los autores principales explicaron, en apretada síntesis, las motivaciones fundamentales que les aguijonearan el intelecto y el espíritu para llevar a puerto seguro Privilegiados del tiempo, como sentido y respetuoso homenaje de los periodistas cubanos al cumpleaños 98 de Fidel, cuyo espíritu de luz sigue iluminando a quienes continúan su gigantesca obra social y humana.