A Fidel, el mejor de nuestros campeones
Recintos y canchas deportivos guardan silencio profundo por la partida física de su más pertinaz vencedor…Luminarias del deporte validan con lágrimas su intenso dolor por la ausencia física de su experimentado líder, mientras en la memoria colectiva perduran sus contundentes batazos para decidir el juego, siempre a favor de nosotros.