Luis Carbonell
Si pudiera decirles quién fue Luis Carbonell… pero ni él mismo lo sabía. No ando buscando palabras. Una madrugada irrepetible, en el salón del aeropuerto Antonio Maceo, me lo confesó: «Yo no conozco a Luis Carbonell, yo aprendo con él, me sorprendo, lo ando descubriendo todavía».


Hay en curso un acoso contra Venezuela dirigido por Estados Unidos a través del ocupante de la Secretaría General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, aseguró un comunicado publicado por la canciller de la nación suramericana, Delcy Rodríguez, en su cuenta de la red social Twitter.
Estoy el martes 14 de marzo en el edificio de entrada al Cementerio Santa Ifigenia, Monumento Nacional, esperando que escampe, con la comitiva de colegas que venimos de La Habana y nuestros anfitriones de la Ciudad Heroica, especialmente convocados para rendir homenaje a Martí y Fidel.
Los periodistas de todo el mundo tenemos una gran coincidencia: un arsenal de gavetas. Antes de la llegada de Barack Obama a la Habana, hace un año, abrimos una de ellas: Calvin Coolidge.
Las medallas y distinciones que se entregan en el mundo por las más disímiles razones, guardan una historia que se lleva consigo cada premiado. Muchos creen que el cargo de conciencia por haber inventado la dinamita llevó a Alfred Nobel a disponer en su testamento la creación de un fondo que premiase a los principales exponentes de la literatura, la medicina, la física y la química, así como a quienes hicieran los mayores aportes para evitar guerras.