Trump no sorprende
Ya este señor presidente millonario de Estados Unidos no sorprende a nadie; porque ahora tiene un nuevo caprichito como si fuera un juguete nuevo que quiere un niño malcriado. Claro, la diferencia está en que el juguete es algo inofensivo, pero no la pretensión, a todas luces, de este señor que ya cuesta trabajo calificarlo.