Asedio de EE.UU. a programa médico cubano que salva vidas en el mundo

Como continuación del comentario anterior Heraldos de la Salud y la Vida, publicado en este portal de la Radio Cubana, el pasado mes, proseguimos acercándonos al tema de la colaboración médica cubana, programa que como práctica internacionalista contribuye a salvar vidas en más de 54 países, y que Washington intenta criminalizar en su más reciente vertiente solidaria.

Pese a la repulsa de numerosas naciones a las medidas del Departamento de Estado norteamericano que busca impedir la Cooperación Médica Cubana, el gobierno del país del Norte prosigue, en ese sentido, con su política de asedio contra la Isla, violatoria de los derechos humanos y la soberanía nacional.

Durante el mes en curso Estados Unidos (EE.UU.) reforzó las disposiciones contra funcionarios y gobiernos vinculados a la colaboración sanitaria cubana bajo el pretexto de trabajo forzoso fomentado por el gobierno del país caribeño, lo que ha sido desmentido en diversas ocasiones por ejecutivos nacionales.

Un papel central en esa política de asedio lo desempeña el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, quien se arroga el derecho de imponer medidas coercitivas contra naciones como Brasil, Granada, países africanos y Cuba, de acuerdo con denuncias de fuentes televisivas.

El halcón de la Casa Blanca intenta de esa forma impedir la contratación de personal sanitario mediante la institución cubana que los representa y anunció recientemente la revocación de visas a exfuncionarios de la Organización Panamericana de la Salud y Brasil por el programa Mais Médicos.

Dicho plan de salud, interrumpido tras la llegada al poder del exmandatario Jair Bolsonaro (2019-2023), resultó implementado en 2013 por la entonces presidenta Dilma Rousseff (2011-2016) mediante un acuerdo tripartito con la Organización Panamericana de la Salud, la oficina regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud, y Cuba.

Tras la revocación de visas por EE.UU. a funcionarios del gigante sudamericano por participar en la implementación del plan de cooperación médica con La Habana, el actual gobernante de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, instó a mediados de este mes a las autoridades estadounidenses a cesar el bloqueo impuesto por ese país a la Isla desde hace más de 60 años.

El jefe de Estado valoró que el cerco económico, comercial y financiero impuesto contra la Isla caribeña deviene estrategia fracasada “que solo ha redundado en perjuicios para el pueblo cubano”.

Las sanciones impuestas por el gobierno de Washington a dos altos funcionarios brasileños vinculados al programa Mais Médicos constituye un ataque injustificable de cara a una iniciativa que salva vidas, enfatizó, por otra parte, el ministro de Salud del país carioca, Alexandre Padhila.

Luego de ponderar el impacto del referido plan, el cual llevó durante años atención médica a intrincados parajes y comunidades vulnerables de Brasil, el funcionario también argumentó que “tenemos mucho orgullo de este legado que llevó atención médica a millones de brasileños que antes no tenían acceso a la salud”.

También, la exmandataria Rousseff tuvo expresiones de elogio hacia el contingente médico cubano, del cual dijo que fue muy bien recibido por la población autóctona al contribuir a la transformación de la atención primaria de salud en Brasil durante su mandato.

No solo Brasil reivindica la trascendencia de las brigadas médicas cubanas, cuyo quehacer muchas veces en condiciones difíciles logró preservar miles de vidas, entre ellas de niños y mujeres de alto riesgo en sus embarazos.

Ante las presiones de Washington para el cese de la cooperación cubana, muchos recuerdan que el primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, expresó de forma pública y tajante: Dejemos algo claro: los médicos de Cuba han sido de gran ayuda, pues este territorio tiene un déficit de personal sanitario, principalmente porque muchos de ellos emigraron a otros países.

Y prosiguió su exposición: “Sin embargo, tenemos mucho cuidado en no explotar a los médicos cubanos que están aquí. Nos aseguramos que sean tratados conforme a nuestras leyes laborales y se beneficien como cualquier otro trabajador”.

Frente a las arremetidas de Estados Unidos, las autoridades cubanas consideran que los más de 24 000 integrantes de las brigadas médicas cubanas desplegados en más de 54 naciones accedieron a laborar de forma voluntaria en esos lugares, donde su principal objetivo es prevenir enfermedades y curar enfermos en las comunidades locales.

Más allá de ese importante análisis, también es evidente que la actual administración de Donald Trump persigue cortar los ingresos que recibe el país por esa cooperación legal, los cuales son utilizados en parte en el sostenimiento del sistema de salud pública y la adquisición de medicamentos para la población de este Estado.

Todo ello, sin dudas, es parte de un esquema imperial, el cual emplea millones de dólares en actividades subversivas, destinados a destruir la Revolución Cubana y por ende barrer sus conquistas sociales, pese a los sistemáticos fracasos del enemigo en su multidimensional guerra económica y mediática durante más de seis décadas.

Fotos tomadas de Internet

Autor

  • Oscar Bravo Fong

    Colaborador de la Radio Cubana. Labora en la Agencia Prensa Latina y trabajó en el Periódico Trabajadores. Colaboró con otras publicaciones de Cuba y México. Cumplió misiones como corresponsal en Angola, Chile y Siria. También dio cobertura a las misiones médicas cubanas en cuatro países de África: Guinea Ecuatorial, Ghana, Mali y Gambia. Varios de sus trabajos periodísticos se publicaron en el libro "Heraldos de la Salud y la Vida".

    Ver todas las entradas Colaborador del Portal de la Radio Cubana

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *