La radio, venerable anciana

En 1904 John Ambrose Fleming inventa la primera válvula termoiónica, que sustituyó al cohesor de Branly y a la piedra de galena para detectar las ondas hertzianas y dos años después, en diciembre de 1906, Lee De Forest introduce, en forma de rejilla, un nuevo electrodo a la válvula de Fleming y surge así el tríodo, llamado por su creador ¨el audión¨. La idea de De Forest revolucionó las radiocomunicaciones porque permitió la amplificación y modulación de señales electromagnéticas, lo que posibilitó el desarrollo de la Radiodifusión Sonora. Se atribuye a De Forest la afirmación de que su descubrimiento permitiría crear el imperio invisible del aire y no se equivocó.

Tal vez David Sarmoff, judío de origen ruso y nacionalizado en los EEUU, nunca pudo imaginarse la radio de hoy cuando le propuso al propio Guglielmo Marconi el negocio de fabricar, para vender a la población, ¨pequeños¨ receptores de radio, que él llamaba ¨Radio Box Music¨, pero Marconi , que para ese entonces era un exitoso empresario de las radiocomunicaciones (había fundado su propia compañía: Wireless Telegraph and Signal Company Limited Marconi), al parecer no entendió o simplemente no le interesó el negocio, por lo que Sarmoff, ni corto ni perezoso, se fue con su idea a la RCA (Radio Corporation of America) , que de inmediato la asumió y desarrolló de forma rápida y eficaz. Sarmoff, que evidentemente era un genio para los negocios, fundó la NBC y llegó a ser presidente de la RCA.

El mérito de David Sarmoff y la compañía RCA es el de estar entre los primeros que pensaron en la radio como un nuevo medio para difundir entretenimiento, información y cultura, por supuesto que también la asumieron como un fructífero y prometedor negocio (venta de receptores, equipos transmisores y publicidad).

Mientras tanto, otro precursor, el Ing. Frank Conrad, que trabajaba para la Westinghouse en Pittsburg, no se conformaba con sólo emplear su transmisor para emitir telegrafía inalámbrica y en su tiempo libre sustituía la llave telegráfica por un micrófono y desde su casa comienza a transmitir música, empleando un piano y un fonógrafo; pronto se dio cuenta que debía agregar nuevos contenidos a sus transmisiones para hacerlas más atractivas ante la incipiente audiencia e incluyó la palabra, la publicidad y noticias locales. En poco tiempo fue tal el éxito y el número, cada vez mayor, de los oyentes que se sumaban a las emisiones de Frank Conrad que la Westinghouse le encarga montar y sacar al aire la conocida KDKA en Pittsburg, lo que se logra en 1920 (el 2 de noviembre de 1920 Conrad saca al aire el primer programa comercial de la KDKA), a esta emisora se le reconoce, por muchos, como la primera en contar con una parrilla de programación regular, estable y continua en el tiempo, de carácter comercial e informativa, el día de su inauguración incluyó un reportaje sobre las elecciones en los EEUU. Fue la primera en otorgársele una licencia oficial para emitir programación pública y comercial.

A Frank Conrad se le debe, entre otros, el haber sido de los pioneros en dotar de contenidos  a la programación de la radio en su etapa fundacional.

Latinoamérica se destacó en el desarrollo, desde sus inicios, de la Radiodifusión Sonora y así tenemos que el 27 de agosto de 1920 sale al aire la primera emisión de radio en Argentina, donde un grupo de entusiastas aficionados a las radiocomunicaciones, entre los que estaban Enrique Telémaco Susini, César Guerrico, Luís Romero Carranza, Miguel Mujica e Ignacio Gómez¨, y que popularmente se les conoció como ¨Los locos de la azotea¨, sacan al aire, desde la terraza del Teatro Coliseo de Buenos Aires la primera emisión de la LOR ¨Radio Argentina¨. Para el día inaugural se preparó el siguiente programa:

…El Dr. Susini introdujo la emisión dando lectura al texto: ¨Señoras y señores, La Sociedad Radio Argentina les presenta hoy el Festival de Richard Wagner, con la actuación del tenor  Maestri, la soprano argentina Sara César y el barítono Rossi Morelli y a continuación se dio pasó a la opera ¨Parsifal¨ de Richard Wagner…

México también está en el grupo de los adelantados, el 9 de octubre de 1921 el Ing. Constantino de Tórnaba saca la primera  emisión, en la ciudad de Monterrey, de la CYL (Constantino y Luis), más tarde cambia el indicativo por el de TND (Tórnaba-Notredame), su primera licencia oficial se le otorgó en 1923.

En 1922 llega la radio a Chile, ese año sale al aire la primera transmisión realizada por la Universidad de Chile desde el diario El Mercurio de Santiago.

En Cuba se reconoce como la primera transmisión de radio, con programación definida y contínua en el tiempo, a la realizada por Luís Casas Romero con la 2LC, el 22 de agosto de 1922 (se le otorgó la licencia de transmisión el 16 de abril de 1923)

Oficialmente, en nuestro país, la Radiodifusión Sonora se inaugura el 10 de octubre de 1922, por el Presidente de la República Alfredo Zayas, con la salida al aire de la PWX, con una potencia de 500 W, en la banda de 400 metros. La PWX fue la primera emisora de una compañía norteamericana en Latinoamérica, la Cuban Telephone Company y funcionó hasta 1934.

Entre los precursores de la radio en Cuba no se puede omitir el nombre de Manuel Alvares Alvares, conocido en el medio radial como Manolín y que,  en mi criterio personal, no ha sido valorado a la altura de su talento y sus aportes al surgimiento y desarrollo de la radio nacional. De origen asturiano, se radicó, en la ciudad de Caibarién. Se conoce que ya por 1920 Manolín construyó y sacó al aire su primer transmisor, por donde emitía música valiéndose de un micrófono y un fonógrafo, esa primera emisora salía con el indicativo 6EV, en la banda de 225 metros.

A Manolín se le atribuye el primer control remoto internacional y la primera transmisión de un evento deportivo en Cuba, al narrar, de forma simultánea, por la 6EV, el 14 de septiembre de 1923, el combate, por la Corona Mundial de Boxeo, entre Jack Denpsey y Luís Angel Firpo, en aquella época sólo a alguien con la sagacidad de Manolín se le pudo ocurrir contratar al Dr. Lorenzo Marín para que tradujera lo que, en vivo y en directo, transmitía la emisora norteamericana  WLW y el periodista Feliciano Reinoso narraba el evento por la 6EV para Caibarién y un poco más allá. Fue reconocido como el radioaficionado activo más longevo, desarrollando esa afición hasta su muerte, el 30 de marzo de 1986, en la misma ciudad que escogió para vivir como un cubano más. Sobre Manolín hay mucho que investigar y aunque no es un olvidado, dentro del sector radial cubano, no ocupa el lugar que supo ganarse a fuerza de talento y osadía.

A partir de 1922 la inmensa mayoría de los países latinoamericanos iniciaron un vertiginoso desarrollo en la Radiodifusión Sonora, no sólo en relación a la tecnología, sino que se realizaron valiosos aportes en cuanto al contenido de los programas y uno de ellos, tal vez el más significativo, lo fue el introducir, con un elevado grado de creatividad, los dramatizados (novelas, cuentos, aventuras, radioteatros, etc.) en la parrilla de programación.

En Europa sucedió algo similar, en los primeros 5 años de la década de 1920 se produjo la eclosión del nuevo medio de difusión masiva. España no fue de las primeras naciones europeas en emitir programación radial, se documenta que la primera emisora fue la EAJ-1 ¨Radio Barcelona¨ pero también reconocen como las primeras emisiones radiofónicas a las realizadas por Radio Ibérica de Madrid a finales de 1923 o comienzos de 1924. En el verano de 1924 se inició el otorgamiento de licencias de emisión a las emisoras EAJ-1 Radio Barcelona, EAJ-2 Radio España de Madrid, EAJ-3 Radio Cádiz, EAJ-4 Radio Castilla, EAJ-5 Radio Club Sevillano, EAJ-6 Radio Ibérica en Madrid.

Pero no hay  dudas, y lo puedo afirmar porque he visitado sus principales emisoras en reiteradas ocasiones, que la radio española ha realizado importantes aportes a la programación radial, primero con las grandes cadenas generalistas, después, con el desarrollo de la FM, las radios temáticas o especializadas y las radiofórmulas, donde marcan un liderazgo reconocido; por lo que, a pesar del desarrollo y competencia de otros medios, la mayoría de la audiencia la sigue considerando como uno de los medios de comunicación más aceptado, de mayor credibilidad,  con una marcada y reconocida capacidad en la formación de la opinión pública.

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