por Es por ello que hundida en el amor que por mi profesión siento, decidí salir de recorrido por varias emisoras de la Capital y a propósito del día de la Prensa investigar, cuál es el concepto de periodismo que los periodistas, como actores del gremio, consideran y aplican en cada uno de sus medios.
Sin pensarlo dos veces cada entrevistado, entre los que figuran Cuqui Dueñas, Demetrio Villaurrutia, Angélica Paredes, Celia Medina, José Fritos y Maximiliano Bartolo, respondía al concepto de periodismo con las primeras palabras e imágenes que venían a sus mentes, llegando al consenso de que periodismo es: compromiso con uno mismo, con el pueblo, con la política, con el país; es instruir, enseñar, guiar, informar; es sentido de la verdad, ética, responsabilidad, crítica constante, noticia, comunicación entre los medios y las personas; irreverencia, cuestionamiento, modestia, respeto, incondicionalidad con la Revolución, objetividad, equilibrio, inmediatez, investigación; complacencia, motivación, sacrificio, diversión, entrega, cultura, versatilidad, verosimilitud, sacerdocio, vocación, aventura, atrevimiento, análisis, mediación, interpretación, diarismo, humanismo, intencionalidad, búsqueda, curiosidad, opinión, convicción, hallazgo, primicia, rapidez y voz.
Cuál no sería entonces mi sorpresa cuando sentí que mis entrevistados al igual que yo piensan que un periodista es una persona dotada de grandes conocimientos, capaz de comprender los procesos culturales para luego hacerlos llegar a la población de la manera más amena e instructiva posible. Se percibe en mis entrevistados, sin importar la generación a la que pertenecen, que todos comparten dentro de la profesión actitudes, rasgos, hábitos, comportamientos, que puede expresarse en su rutina de trabajo diaria.
«Unos dicen que el periodismo es la construcción de la realidad social, otros dicen que es la interpretación de esa realidad, yo creo que el periodismo es las dos cosas. Creo que hoy, durante casi dos décadas dentro del gremio me mantengo construyendo la realidad con los aportes de mi mirada de comunicadora y a la vez interpretándola, y es ahí precisamente donde considero que radica el arte de comunicar y el arte de hacer periodismo», explicó Angélica Paredes, periodista de la emisora Radio Rebelde.
Maximiliano Bartolo, quien es periodista de Radio Ciudad de la Habana expresa que «el periodista se debe mucho a su trabajo, tiene que tener buenas relaciones con su fuente y habilidad para poder tratar con todo tipo de entrevistados. Los periodistas no pueden imponer su voluntad, tienen que ser lo más sencillos posible, pues el prestigio lo otorga el conocimiento general que tengan los profesionales sobre los asuntos».
Por su parte, Demtrio Villaurrutia, director del Noticiero Nacional de Radio, que transmite por la cadena nacional la emisora Radio Rebelde, considera que «un periodista tiene que ser una persona que constantemente se esté cuestionando cosas, que estudie mucho pues nada le puede ser ajeno. No se puede ser un periodista de 6 horas, el periodismo es una profesión que se lleva a tiempo completo. Como características personales pienso que para ser periodista hay que ser inquieto, «agresivo». El periodismo es una profesión de interpretación constante de la realidad, hay que tener bomba, sentir lo que escribimos, y a la vez ser responsable de ello».
Con un amor hacia la profesión que es perceptible a simple vista los entrevistados apuntan que al periodista no puede faltarle el cuestionamiento constante de la realidad, incluso el cuestionamiento hasta de su propio criterio. El periodista tiene que mirar la realidad desde una perspectiva aguda, «no le pueden faltar deseos de entender en verdad qué pasa a su alrededor más allá de lo evidente», «tiene que tener un interés ineludible hacia la política», «honradez», «algo de rapidez escribiendo y alguna tendencia a poder contar las cosas de un modo interesante, sin tener que llegar a ser un cuentista».
No faltó entonces quienes me hablaran de los valores de los periodistas cubanos que según el sentir de mis entrevistados deben comenzar a formarse desde la academia, y resaltan entre ellos el compromiso político con la verdad, la responsabilidad y la laboriosidad.
Después de lo visto mi temor por escribir sobre el periodismo y los periodistas, lejos de disminuir, aumentó, pues pude percatarme que muchos de mis entrevistados llevan más de 10 años en el gremio profesional y pese a ello, aun comparten ese enorme amor que se puede llegar a sentir cuando se experimenta el intercambio con los lectores, los oyentes o los televidentes.
Entonces entendí que aunque sean muchos los años que permanezcamos haciendo periodismo, ese bichito de sentir nuestra profesión como la mejor del mundo, nunca se nos va a apagar, porque somos los profesionales de la prensa unos eternos enamorados de la comunicación.