El programa de aproximadamente una hora de duración sale al aire cada domingo justo al mediodía, bajo la dirección y selección musical de Joaquín Quintero y la conducción de Maureen Delgado.
La idea original también pertenece al creador del proyecto Paulo FG y funciona como una variante con más oportunidades para revelar todas las actividades que ocurren cada semana antes de llegar al programa televisivo.
Hay que destacar que esta no es la primera vez que un programa de audiencia estelar incursiona en un proyecto radial, pues ya existe la versión de Pasaje a lo desconocido y Lucas Radio. El primero de estos ejemplos tiene una estructura diferente por la naturaleza del programa; mientras que el segundo es apenas un volcado simple del ya famoso programa de videos clip.
Y ahí es donde radica una de las fortalezas del programa, pues cuenta no solo con la presencia -y comparecencia- a ratos de los «coach» de cada región, sino con los concursantes que cada semana son enviados a la zona caliente. Cada uno de estos entrevistados tiene la oportunidad de opinar sobre la competencia y dar avances sobre lo que aún queda por ver.
Por otro lado, de mano de la periodista Dayli Díaz cada salida al aire tiene una exclusiva, muchas de ellas sobre las clases magistrales que reciben los artistas de cada zona del país, las actividades comunitarias que realizan y cualquier otro detalle que conforma la gran maquinaria de Sonando en Cuba en esta segunda temporada.
De modo que Taíno incrementa su audiencia con una propuesta que gana con respecto al programa televisivo en atención real, pues dado que no existen las distracciones propias de un reality show (¿si no por qué en el mundo entero las audiciones de este tipo de concurso se hacen a ciegas?) el radioyente puede concentrarse en escuchar realmente la calidad interpretativa de cada competidor.
Esto sin mencionar que la acertada selección de temas musicales antológicos en la voz y versión de figuras jóvenes atrae no solo a los adultos y ancianos (que sabemos sigue siendo la mayor audiencia radial en Cuba) sino la participación de muchos jóvenes que en cada emisión piden volver a escuchar los temas que más les han gustado de cada ronda de competición.
Todo esto y más trae cada meridiano de domingo Radio Taíno, una emisora que ya definida por su perfil musical y su alcance nacional trae continuamente atractivas ofertas que pocas veces carecen de buen gusto en cuanto a diseño y realización.
Sonando en Cuba no es la excepción, es de hecho una confirmación de que la radio y la televisión pueden ser homólogos y no antagónicos.