Para que no se pierda la memoria musical
Siempre fue una práctica en la difusión musical la transmisión y reiteración de temas que respondían a lo más popular de cada momento. Ello es válido aunque no siempre esto sucede por la calidad de las obras, sino por la inadecuada selección, o mejor dicho, por el insuficiente conocimiento de programadores o el aparente criterio de complacer a los oyentes.
Por suerte en todas las radioemisoras las parrillas de programación aceptaron espacios dedicados a recrear épocas, ritmos, autores e intérpretes, que sentaron pautas en el quehacer musical de Cuba y de otras partes del mundo. Entre los pioneros en este tipo de programas, el reconocimiento para Luis Grau Jover, fallecido el 28 de junio de 1981.