Simplemente HAYDÉE
Haydée apareció en mi vida en los albores profesionales, cuando hacía de malabarista con el bolígrafo, arriba-abajo; cuando corría de Santiago a Guantánamo, de Guantánamo a Santiago, cuando rojo de hambre, rojo de ansias, rojo de letras, rojo de sexo… exploraba la aldea de Boti, la ciudad del Guaso.