Díaz-Canel, muy emocionado, se detuvo en un sitio para hablar a la multitud, respetando el distanciamiento físico.
En medio de reiterados aplausos y de un trinar permanente de aves en el acogedor lugar, el Presidente se dirigió a una representación de este pueblo amable y respetuoso.
“Como ya estábamos entrando en la normalidad decidimos restablecer el sistema de trabajo de Gobierno y venir a las provincias, y a la primera que había que venir era a Santiago”, aseguró Díaz-Canel.
En su improvisada alocución, el mandatario subrayó que “queremos reconocer el trabajo de Santiago en el enfrentamiento a la pandemia; ustedes vencieron rápido a la pandemia y llevan muchos días ya, meses, sin casos, pero no puede haber confianza, hay que ponerse el nasobuco, hay que mantener separación física, hay que ser responsables y consecuentes para evitar que haya rebrotes. ¿De acuerdo? Y ya incorporarnos todos al trabajo, a la actividad productiva para también levantar el país”.
“Felicidades, Santiago; y nuestro reconocimiento”, concluyó el Jefe de Estado.
El presidente Díaz-Canel había llegado a la concurrida heladería “La Arboleda”, luego de conocer la impecable remodelación que favoreció al Hotel Deportivo de la ciudad, donde elogió la limpieza, el orden y el buen gusto.
Ya son más de 160 días en la provincia sin un solo caso de la COVID-19, y esa otra heroicidad, ha sido reconocida por el Jefe de Estado.
El Presidente de la República aprovechó la tarde de este jueves para visitar lugares de una ciudad valiente, para la que no hay metas imposibles de cumplir, ni batallas que no se puedan vencer.