Una radio diversa y para todos (+Video)

La Radio fue desde su inicio – y sigue siéndolo gracias al desarrollo de la electrónica y las telecomunicaciones – un acontecimiento tecno-científico. A partir de entonces todo comenzó a cambiar. También es una realidad cultural con hondas raíces sociales. De ahí que la perspectiva de ser cada vez más incluyente, es punto de referencia para ampliar su horizonte. 

Cada vez se acerca más a la categoría de “medio de comunicación” en su sentido más legítimo, sin dejar de constituir fuente difusora de información. Realizadores y radioescuchas abandonamos los viejos roles de “emisores” y “receptores” de la información para imbuirnos – en el decir del investigador canadiense Jean Cloutier (1) – en un proceso que nos hace a todos encarnar  ambos roles, es decir, de “emirec”. Significa que estamos ante una nueva dimensión de la Radio, que le hace posible su misión a través de una oralidad como forma de intercambio social. 

La Radio se hace  más social, incluyente, participativa, comunitaria y democrática. El sonido radiofónico, junto a sus mensajes, ha roto la telaraña de la información como estricto propósito de énfasis en contenidos y efectos para – sin abandonarlos del todo –  enfatizar en el proceso, entendido éste como interacción comunitaria, ejercicio del pensamiento inteligente y búsqueda común de soluciones a las problemáticas que inciden sobre las sociedades humanas contemporáneas de cada país, y en su conjunto planetario. 

En palabras del investigador italiano Tiziano Bonini:

Las redes sociales han hecho posible que los radioyentes comentemos los programas emitidos por nuestras emisoras preferidas, e incluso que influyamos en su concepción”.  

En ese aspecto, las radioaudiencias ya ofrecen una retroalimentación por adelantado, más exactamente una “prealimentación”, posible a partir del intercambio de los radialistas con su entorno.  Más adelante el propio especialista añade:

Sin embargo, la otra cara de la moneda de esta interacción positiva con los ciudadanos es que las grandes empresas tecnológicas acopian datos sobre nuestras actitudes y conductas para lucrarse con ellos”. (2)

De esta segunda afirmación concluimos el papel de control, vigilancia y manipulación individual y colectiva ejercida por las grandes transnacionales en la red de redes, una realidad que nadie debiera ignorar.   

La Radio contemporánea no es solo propiciadora de sonidos, como lo fue antes. Hoy nos ofrece contenidos visuales y brinda a su vez una posibilidad de cercanía y contacto que la eleva a categoría háptica.  Cuando nuestros dedos se desplazan por el display del teléfono móvil, la Tablet o la PC, establecemos una relación de cercanía. Tiene lugar un encuentro táctil con una realidad sustancial que asume virtualidad gracias al soporte tecnológico que la transporta, y vuelve a convertirse, una vez en nuestro órgano auditivo en realidad que asumimos como sujetos, y reproyectamos hacia la Radio misma y hacia nuestro entorno. Se trata de una percepción que suma a lo auditivo la perspectiva visual y táctil. A partir de esa nueva realidad nos relaciona con la Radio, intercambiamos e influenciamos en sus objetivos y contenidos. 

El Día Mundial de la Radio el pasado 2019 se centró en el “Diálogo, la tolerancia y la paz”. De modo coherente la “Diversidad” se articula como tema central para este año, 2020.  Un análisis medular lleva a admitir que, para la fluidez de un diálogo entre culturas y dentro de cada cultura misma; para que la tolerancia no sea un mero “soportar” o “dejársela pasar” al “otro”, y para que exista una paz sólida, armónica y sostenible, hace falta reconocer, entender y aceptar la Diversidad, misma que solo es posible cuando desde la perspectiva de la Radio, su labor se enfoca hacia una pluralidad constructiva.  

Cuba se suma a la celebración del Día Mundial de la RadioLa Radio Cubana está en amplia ventaja frente a los retos de asumir las nuevas tecnologías. Su carácter inclusivo, los motores de interactividad que desata y la sinergia desarrollada con todos los actores sociales, instituciones, comunidades e individuos hace posible que llegue a ser del todo portadora de un espíritu de Diversidad sin precedentes. 

En lo concerniente a los y las radialistas, nos toca entender la magnitud de estos desafíos. Para ello urge la continua superación en todos los ámbitos del saber, razón “sine qua non” para dar informaciones exactas y claras. Se precisa de un llamado reiterado a la acentuación del compromiso social del que estamos investidos para ofrecer productos de calidad, a partir del vínculo total de los radialistas con su realidad comunitaria y social. 

Es igualmente necesaria una creciente y mejor gestión de contenidos, tomando en cuenta la inserción de nuestro medio en la red de redes, lo cual exige de ella una presencia óptimamente cualitativa en todos los órdenes. Paralelo a ello, tampoco debemos descuidar el producto radial tradicional, y hacerlo cada vez más incluyente en cuanto a su alcance social. 

Asumir la Diversidad como fuente de riqueza colectiva, nacional y humana, y no como un problema. En todo caso lo sería si se le diera la espalda e ignorara todo el caudal aportador que posee. Ningún día mejor que éste para recordárnoslo a cada uno de nosotros y al mundo, en su totalidad.

https://www.youtube.com/watch?v=j3B5ibqrq2Q

 ************
(1) Jean Cloutier. Teórico canadiense investigador en Comunicaciones.

(2) Tiziano Bonini. Encargado de curso e investigador sobre los puntos de contacto entre la radio, Internet y las redes sociales en la sección de Estudios sobre Medios de Comunicación e Información del Departamento de Ciencias Sociales, Políticas y Cognitivas de la Universidad de Siena, Italia.

Autor