Enfermería por la salud y sonrisa de los niños (+Audio)

El sentimiento tuvo sostén en la vocación por ver sonreír a los más pequeños, una aptitud que demanda mucha consagración para sanarlos porque en materia de cooperación, los niños no son muy dados a las atenciones en enfermería.

“Desde que uno llega al turno de trabajo a las siete de la mañana hay que estar pendiente de todo: de los pacientes y de las madres también, que sean muy cuidadosas, ahora más con las medidas de bioseguridad orientadas para prevenir la Covid-19. Tenemos que roblar los esfuerzos, ser más previsores, adelantarnos a lo que pueda suceder.

“Los momentos tensos los vivo con mucho estrés, pero con la determinación de salir siempre adelante. Me maravilla la sonrisa de los pequeñines, verlos salir por sus propios pies o sonriendo en brazos de los padre o cualquier otro familiar constituye la mayor satisfacción del mundo.

“Son muchos los recuerdos, los estremecimientos y la cercanía e identificación por algún paciente, pero recuerdo muy nítida en la memoria a Daylín, una niña que casi recién nacida tuvimos aquí en el servicio: no dejaba de sonreír a pesar de la colostomía que se le hizo. Fue la hija de todos hasta que egresó de nuestro hospital. Hoy es una mujer hecha y derecha.”

Enclavado en el populoso Reparto Caymari y con más de un siglo de prestación de servicios, el hospital infantil Hermanos Cordové, de Manzanillo, cuenta hoy con 225 especialistas en Enfermería, de cuya cifra 19 hombres, 202 poseen la licenciatura y tres son expertas del Programa Materno – Infantil. Aunque cada servicio posee sus características, la terapia intensiva pediátrica y la unidad quirúrgica concentran las mayores complejidades.

La Licenciada Katia Avalo Sánchez, Jefa del Departamento de Enfermería, expone que en todo determina la supervisión y el control. 

“La atención directa a los pacientes y los acompañantes, el desempeño profesional y la calidad en la prestación en cada servicio, así como las revisiones específicas que se efectúan en las distintas salas.

“Creo que sin las enfermeras a un colectivo de cualquier hospital le sería complejo funcionar porque nosotras decidimos mucho, estamos las 24 horas del día en cualquier escenario.

“Tenemos que visualizar todo: la labor de las auxiliares de limpieza hasta los signos y síntomas que aquejan a los niños y su mamá, porque a veces la progenitora es muy joven y son un pequeño y una adolescente lo que tratamos y entonces la enfermera debe profundizar en la problemática familiar desde lo social y patológico.”

Abrazos convertidos en sonrisas con la mirada, reconocimientos a los servicios más destacados, estímulos individuales y debates científicos mediante las redes sociales de Internet son algunas de las actividades con las cuales en el hospital infantil de la región del Guacanayabo festejan este 12 de mayo, el Día Internacional de la Enfermería.                                                            
La hoja de servicios de Martha Cedeño Torres a lo largo de 29 años por las salas del “Hermanos Cordové” reserva espacios para las historias clínicas en el servicio de respiratorio, cirugía, nefrología, infecciosos y ahora es la jefa del equipo de psiquiatría infantil. 

Cedeño Torres es además la vicepresidenta de la Sociedad cubana de Enfermería en el centro, desde hace una década.

“Definen el sacrificio y la consagración, lo que se ha hecho más evidente ahora en el enfrentamiento al nuevo coronavirus, porque nuestro hospital fue seleccionado para atender a los pacientes pediátricos sospechosos de padecer el virus. Si los análisis son positivos pues entonces se trasladan hasta la unidad de Santiago de Cuba.

“La Jornada la iniciamos con una pequeña ceremonia en la cual la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) entregó al colectivo un reconocimiento por la labor de enfrentamiento al Sars–CoV 2, divulgamos a través de nuestros sitios en la red de redes todas las actividades.

“Observando las medidas de distanciamiento físico efectuaremos esta mañana un café debate y entregaremos la Medalla del Honor a un grupo de profesionales sobresalientes por su quehacer en la Zona Roja de la institución.”    

El apóstol cubano José Martí refirió que es la enfermería una de las profesiones más nobles y humanas del mundo.

Cada amanecer, las enfermeras y enfermeros del hospital pediátrico Hermanos Cordové, de la ciudad del Golfo encumbran el postulado desde lo más significativo: la salud y la sonrisa de los niños.

 

 

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