López definió el espíritu que ha marcado la decimoquinta reunión trimestral para chequear el Convenio de colaboración entre ambos países.
Sobre los días de trabajo vividos por representantes de ambas naciones en la sede de la Cancillería, Roberto López explicó a la prensa que estos encuentros permiten «una evaluación de todas las actividades que realizamos en el marco del Convenio Cuba-Venezuela».
Se trata, dijo, de una mirada al detalle, la cual pulsa la ejecución física y eficiencia de cada proyecto, la participación en ellos de los colaboradores cubanos y las dificultades que se van presentando en el camino de cumplir con los propósitos trazados.
Según dijo el vicetitular de Comercio Exterior, la reunión pudo dar seguimiento a proyectos tan importantes como los de Salud, los cuales constituyen logros de la Revolución Bolivariana, y de la cubana, la cual es capaz de mantener a más de 27 000 colaboradores que dan lo mejor de sí, con firmeza, a pesar de las múltiples adversidades por las cuales ambas naciones atraviesan.
«Arrostrar contextos adversos a nivel mundial -económica y financieramente hablando-, sobreponerse incluso a contratiempos generados por la naturaleza como el reciente huracán que azotó a Cuba, y seguir teniendo resultados en un Convenio nacido hace 16 años, es algo que solo puede lograrse entre dos países hermanos», expresó.
Esta es la expresión más clara -definió al Convenio- de lo que significa Venezuela para nosotros y de lo que significamos nosotros para ella: una colaboración única y que solo es posible por esa solidaridad bien fraguada desde Chávez y Fidel, seguida por Maduro y por Raúl.
En tanto, Ramón Gordils, vicetitular venezolano para la Cooperación Económica del Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores, declaró que «la magnitud de la cooperación entre Cuba y Venezuela ha abarcado prácticamente todos los sectores de nuestras sociedades, en los ámbitos económico, político, y cultural».
Es un acercamiento, aclaró Gordils, que no se produce como consecuencia de un impulso desordenado, sino a través de su administración o conducción mediante proyectos específicos. «La cooperación alcanza niveles tan importantes, resaltó, que se requiere cada vez mayor celo a la hora de evaluar cómo esta funcionaE, remarcó.
También subrayó que a pesar del bloqueo a las dos naciones, de la reducción de los precios del petróleo, de las dificultades, de la violencia de calle, tenemos en Venezuela una cooperación prácticamente intacta con Cuba.
Entre los impactos más notables, el viceministro bolivariano mencionó la presencia de miles de colaboradores cubanos en materia de salud, «lo cual ha traído a nuestro país un sistema de salud totalmente democrático porque no excluye a nadie; la existencia de programas de fomentos culturales y deportivos; y una importante alianza en el carácter económico».
«En el 2018 seguiremos avanzando. Ya lo viviremos como resultado de todo el capital humano formado en todos estos años», resaltó Víctor Gaute, el jefe de todas las misiones cubanas en Venezuela, quien además definió los días de trabajo como buenas sesiones, a la altura del histórico, fecundo momento que vive el pueblo venezolano en su batalla contra cualquier fechoría interna o externa del enemigo.
Fuente: Granma / Editor: Conrado Vives Anias.