por A las ocho de la noche, hora acordada, inició el intercambio que en mi experiencia profesional comienza lento y luego no tiene para cuando parar. Frank Domenech Williams, presidente del CDR 4 conduce las intervenciones acompañado de los juristas Madelín Fernández y Osmel Espinosa.
Los vecinos del lugar expresan sus criterios libremente pero con puntos de coincidencia vinculados al agradecimiento y satisfacción por la posibilidad de aportar un granito de arena en la conformación y consolidación del proyecto ley código de las familias.
Y en eso se escucha una voz que expresaba…”que me paso la historia ayudando a otros niños, a la familia, a los vecinos pero yo no pude ser madre pues cuando salí embarazada, lo perdí. No tuve la oportunidad de ser madre de otra manera…
Ella es Mirta Rizo Gómez, integrante de la dirección del núcleo del Partido Zonal y tuvo la oportunidad de participar en la conformación de la Constitución de la República de Cuba a nivel municipal, cuya experiencia y adiestramiento lo aplicó en la consulta popular del código de las familias en el barrio.
“El Código de las Familias al igual que la Constitución de la República de Cuba, son documentos que son el reflejo de la Isla, de la Socialista, de la de nosotros. Ahí se ve el carácter humanista de la Revolución que no deja desamparado a nadie.
“Y ese tema de la adopción siempre la dirección del país lo ha venido siguiendo por muchos años porque yo fui una de las mujeres que no pudo tener hijos. Siempre se me decía que no podía adoptar una niña que tenga la tez negra por ser rubia y por ser mi esposo castaño, comenta emocionada Rizo Gómez, vecina de la circunscripción 15 del reparto Alturas de La Habana, del Consejo Popular Altahabana – Capdevila, municipio Boyeros.
“No fue porque no se quiso sino por las leyes, lo que está establecido para no afectar la psiquis del niño desde el punto de vista psicológico. Nosotros conocemos que desde siempre ha habido protección en eso.”
El testimonio de Mirta, es la prueba veraz del alcance y la importancia de someter el proyecto ley código de las familias a consulta popular. Cada una de las vivencias mostradas en los encuentros comunitarios robustece dicho instrumento jurídico en aras de que se parezca a la sociedad que nos merecemos las cubanas y cubanos.