por Una ofrenda floral fue depositada ante la tumba que atesora los restos de la legendaria mambisa en el cementerio patrimonial Santa Ifigenia, durante una ceremonia presidida por la primera secretaria del Partido en el municipio de Santiago de Cuba, Niurka Bell, y la segunda secretaria del Comité Nacional de la Federación de Mujeres Cubanas, Rosmari Santisteban Lugo, quien en declaraciones a la emisora Radio Rebelde precisó:
Rendirle hoy homenaje a Mariana es un alto compromiso no solo de las mujeres, sino de la familia cubana, porque hoy más que nunca necesitamos que los jóvenes entiendan sus valores, madre de todos los cubanos que nos inculcó y enseñó el amor a la patria y a la libertad, con el compromiso que debemos tener hoy todos los hijos de la Revolución en la construcción de nuestro socialismo».
Mariana Grajales falleció en Kingston, Jamaica, el 27 de noviembre de 1893, y sus restos fueron trasladados a Santiago de Cuba el 24 de abril de 1923, descansando desde entonces en el cementerio patrimonial Santa Ifigenia, muy cerca de tres personalidades cimeras de la Revolución Cubana: Céspedes, Martí y Fidel, que estimó su ejemplo de patriota cubana y en su honor bautizó con su nombre el aguerrido pelotón femenino surgido en la Sierra Maestra en 1958.