Implementan estrategias cubanas para estabilizar disponibilidad de medicamentos

Así lo afirmaron directivos del Ministerio de Salud Pública (MINSAP) y el Grupo Empresarial BioCubaFarma en la más reciente emisión del programa radiotelevisivo Mesa Redonda.

El Dr. Emilio Delgado Iznaga, director de Medicamentos y Tecnologías Médicas del MINSAP, señaló que luego de 2016, cuando por problemas financieros se reportaron unas 100 faltas de medicamentos -el momento más crítico en los últimos tiempos-, hubo una tendencia en 2017 y 2018 a la disminución paulatina de las faltas y bajas coberturas de fármacos.

“Ello hizo que al cierre de 2018 tuviéramos la menor cantidad de faltas de los últimos años, 38 medicamentos”, dijo, “aunque a pesar de los esfuerzos no se logra una cobertura total”.

Que haya una estabilidad en la provisión de medicamentos implica importación, producción, almacenamiento, distribución en las farmacias; búsqueda, evaluación y contratación de nuevos proveedores cuando se retiran los existentes; transacciones financieras complejas por la situación especial que genera la política de Estados Unidos hacia Cuba y operaciones logísticas para traer esos productos (medicamentos o materias primas) a la Isla.

“Las tensiones financieras y la situación particular de incremento de la agresividad del gobierno de Estados Unidos y el bloqueo han tenido sin dudas un impacto en la dificultad de mantener esa estabilidad que habíamos tenido en los últimos tiempos. Hay problemas muy serios hoy en el sector de los bancos. No son pocos los bancos que hoy no pueden aceptar pagos para hacer transacciones relacionadas con Cuba”, apuntó Delgado.

«Se hace difícil a veces incluso contando Cuba con los fondos para el pago, por los requisitos y complejidades que tiene para los bancos procesar pagos cubanos. La situación es más compleja cuando los medicamentos tienen componentes estadounidenses», explicó.

El director de Medicamentos y Tecnologías Médicas del MINSAP recordó que, además, el programa de medicamentos tiene un ordenamiento. “La situación respecto a otros productos se resuelve llegando estos al país. En el caso de los medicamentos no sucede así: hay regulaciones y procedimientos relacionados con la seguridad de los pacientes. Un proceso de análisis de materias primas, evaluación de los registros, inspecciones de las fábricas, para tener la confirmación de que los productos usados son adecuados”.

El Programa Nacional de Medicamentos se gestiona a través del cuadro básico, la lista oficial de medicamentos, tanto para la producción como para la importación, según un análisis del cuadro de salud de la población, la disponibilidad de nuevos medicamentos y otros factores, por lo que puede cambiar.

La Industria Biofarmacéutica Cubana suministra hoy una gama importante de productos al Sistema Nacional de Salud, incluidos medicamentos de uso hospitalario y venta en farmacia, medios de diagnósticos, reactivos de química clínica, equipos, dispositivos médicos y materias primas para asistencia médica y dispensarial, lo cual representa una gran fortaleza de nuestro país.

Por su parte, la M. Sc. Rita María García Almaguer, directora de Operaciones y Tecnologías de BioCubaFarma, precisó que en el primer cuatrimestre de 2019 “no pudimos mantener la tendencia a la disminución de las faltas que mantuvimos en 2017 y 2018. El promedio fue de 72 faltas, y el mes de abril fue el de mayor afectación al finalizar con 85 faltas, incluidos 16 fármacos de tarjetas controladas”.

La directiva afirmó que las causas fundamentales de esa afectación han sido la falta de materias primas y otros materiales, “en lo que no solo han influido los problemas financieros, sino el recrudecimiento de las acciones del bloqueo, que está teniendo un alto impacto”.

Como parte de ese impacto, proveedores habituales han dejado de suministrar productos a Cuba, y se ha hecho imposible en ocasiones realizar las transacciones bancarias para realizar los pagos a los proveedores.

Otras causas han sido el cierre de plantas productoras en China por problemas de contaminación ambiental. “En el mercado chino se adquiere la mayor cantidad de excipientes utilizados en nuestras formulaciones”, explicó García Almaguer, y recordó que en esta industria, altamente regulada, “el proceso de evaluación y validación de nuevos proveedores toma tiempo para recomenzar el proceso de contratación”. Toma tiempo el cambio de un proveedor a otro.

También ha habido afectaciones logísticas que han demorado el arribo de materias primas al país, “lo cual hace que no podamos contar con esos productos en el momento en que los necesitamos”.

Este dato es más importante cuando se tiene en cuenta que en cada formulación intervienen como mínimo siete materias primas, y no vienen de un mismo mercado o proveedor. Si falta una sola de esas materias primas, el medicamento no puede formularse.

“Una vez que se logra el producto y este es liberado por control de la calidad, sin perder tiempo comienza el ciclo de distribución por nuestra Empresa EMCOMED desde los laboratorios a las droguerías del país, donde se realiza la recepción y despacho hacia los más de 4 000 sitios con que se cuenta a todo lo largo y ancho del territorio nacional”, señaló.

Actualmente, en  los tres primeros casos ya se comenzaron a producir y para los otros cinco, las materias primas están contratadas,  lo cual hace prever que en julio puedan estar disponibles.

“Las medidas aplicadas por el MINSAP, en cuanto a establecer orden de prioridad en el cuadro básico de medicamentos, teniendo en cuenta la sensibilidad del producto, nos permite ir aumentando paulatinamente las coberturas de estos, esencialmente en las tarjetas de control para que haya presencia durante todo el mes en la farmacia, ya que hoy en la mayoría solo se alcanza a entregar entre 30 y 35 días de cobertura, lo que significa que una vez llega el producto a la farmacia, este se agota de inmediato y se mantiene en falta durante el resto del mes hasta la próxima distribución”.

Entre los productos que más se consumen del cuadro de medicamentos, el 53% está concentrado en 12 medicamentos, muy populares, que se relacionan mayormente con enfermedades crónicas. Algunos de ellos son el Enalapril, el Cartopril, el Amlodipino, el Salbutamol y la Metformina.

Existen algunos medicamentos que la industria nacional no tiene la capacidad para producir en los volúmenes que exige la demanda.

En ese caso, dijo la directiva de BioCubaFarma, está la Dipirona 300 mg en tabletas, analgésico no opioide».

“En el pasado mes de mayo disminuyeron las faltas de medicamentos y la tendencia es a una mayor estabilidad productiva. Nosotros no podemos asegurar que en lo adelante no van a existir afectaciones puntuales de algunos medicamentos que hoy conforman el cuadro básico de medicamentos, pero sí podemos asegurar el alto compromiso de los trabajadores de BioCubaFarma con la responsabilidad que tenemos en nuestras manos. Continuaremos realizando el máximo esfuerzo para que las afectaciones sean las mínimas posibles”, subrayó García Almaguer.

“Todos los medicamentos de tarjetón están asegurados. Las demoras responden al proceso logístico de traer los productos a Cuba. Haremos cuanto sea necesario para minimizar los tiempos de entrega”, agregó.

Y concluyó: “Podemos afirmar responsablemente que los trabajadores de BioCubaFarma están haciendo un gran esfuerzo para que una vez arriben los recursos se minimice al máximo posible el tiempo de entrega del medicamento a la población, siempre cumpliendo los procedimientos establecidos para cada caso. Para ello se extienden las jornadas de trabajo, incluyendo los fines de semana. Se cuenta con un fuerte movimiento de innovadores que permite mantener todo el equipamiento tecnológico trabajando”.

La estrategia de ciencia e innovación de la industria biofarmacéutica está orientada a los principales problemas de salud del país, así afirmó el Dr. Rolando Pérez Rodríguez, Director de Ciencia e Innovación del Grupo Empresarial BioCubaFarma al intervenir en la Mesa Redonda.

“Entre estos se destacan las enfermedades infecciosas emergentes y las enfermedades crónicas no transmisibles, como las enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares, el cáncer, enfermedades inflamatorias y autoinmunes, y desórdenes cerebrales como la enfermedad de Alzheimer”, agregó.

Según informó el directivo el BioCubaFarma desarrolla un Programa de Introducción de Medicamentos en el sistema nacional de salud.

“En los últimos 5 años se han introducido en el mercado 62 medicamentos, 11 antibióticos, 4 citostáticos para tratamiento de cáncer, 4 medicamentos para tratamiento del dolor y 2 anti – retrovirales para el tratamiento del SIDA, entre otros, tanto para uso hospitalario como para su comercialización en farmacias. Este Programa permite a su vez la actualización del Cuadro Básico de Medicamentos, con productos más seguros y eficientes, de acuerdo a los estándares internacionales”, afirmó.

Pérez Rodríguez explicó que el Programa de Introducción de Medicamentos contiene aquellos productos genéricos y biosimilares -no cubiertos por patentes-, que permiten la sustitución de importaciones, así como también productos innovadores obtenidos a partir de la actividad de investigación–desarrollo que realiza la industria biofarmacéutica en colaboración con Universidades y otras instituciones científicas del país.

Precisó también que en el año 2019 Medicuba tiene un plan de importación de 290 medicamentos por un importe superior a los 100 millones de dólares.

“Las tres cuartas partes (74.4%) de ese monto de dinero se concentran en 45 productos. BioCubaFarma trabaja en la actualidad en la investigación – desarrollo de 31 de estos medicamentos, cuya importación alcanza una cifra superior a los 40 millones de dólares”, apuntó el directivo.

Al decir del especialista, se reportan aproximadamente 10 mil medicamentos en desarrollo a nivel mundial, de estos el 75% se consideran “primeros en su clase”, es decir, son medicamentos que actúan a través de un mecanismo nuevo para el tratamiento de una enfermedad.

“En Cuba, existen 101 biofármacos en diferentes fases de investigación – desarrollo, aproximadamente el 1% de los medicamentos en desarrollo a nivel mundial, cifra relevante considerando la población de nuestro país. El 75% de estos proyectos poseen derechos de propiedad intelectual, es decir están protegidos por patentes, y el 26% de éstos son medicamentos potencialmente “primeros en su clase”.

Asimismo, el Director de Ciencia e Innovación de BioCubaFarma subrayó que a pesar de las dificultades y adversidades que la Revolución deba enfrentar, “la ciencia y la innovación es motor del desarrollo y una palanca para vencer todos los desafíos, como nos enseñó nuestro Comandante en Jefe Fidel Castro. Cuba ha demostrado, que con una voluntad política firme, un país pequeño y bloqueado puede ser una potencia médica mundial”.

Otra de las prioridades del Programa Nacional de Medicamentos en el país es la Medicina Natural Tradicional. Al cierre de 2018 unos 153 renglones se incluían en el cuadro básico de fármacos del país, lo que evidencia su crecimiento desde su introducción en el año 2013, comentó el Dr. Johann Perdomo Delgado, Jefe del Departamento de Medicina Natural y Tradicional del MINSAP.

“De ello, 107 medicamentos son de producción local y 63 renglones a partir de la industria. Hemos logrado fabricar en el 2018 más de 78 millones de unidades y nuestra aspiración para el presente año es alcanzar los 90 millones de productos naturales”, adelantó.

Como parte del desarrollo de esta rama, Cuba cuenta con 255 especialistas en Medicina Natural Tradicional. “Todo lo que se hace tiene una evidencia científica. Debemos señalar que no es solo Cuba quien se interesa por su avance, ya que países como Alemania y Canadá hacen un amplio uso del mismo”.

Fuentes: Radio Habana Cuba, Cubadebate / Editor: Conrado Vives Anias

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