por Salas, de los 97 kg en el estilo libre, sacó el extra y todo su coraje en la pelea por el bronce ante el campeón olímpico de Londres-2012, Sharif Shafirov (AZE), y lo venció 3-3 (marcó el punto final), en un combate en el que también tuvo que luchar contra una vieja lesión en un tobillo.
De 34 años y bautizado en el mundo de la lucha como el gimnasta, Salas logró en la lid olímpica tres triunfos con un solitario revés.
El canotaje cerró con su buen paso y siguió ilusionando de cara al futuro.
Las jovencitas Yarisleidis Cirilo (19 años) y Katherin Nuevo (18) consiguieron diploma olímpico con el sexto lugar en el C2-500 metros (2.01.623 minutos), en el estreno de la canoa cubana bajo los cinco aros.
En el C-1-1000 metros para hombres, el campeón olímpico del C-2 Fernando Dayán Jorge concluyó en un meritorio séptimo lugar, en un esfuerzo sobrehumano, ya que fue su sexta regata en Tokio.
José Ramón Pelier, campeón mundial juvenil y uno de los nuevos talentos de la especialidad, resultó noveno al dominar la final B, pero lo curioso es que lo hizo con 4.02.915, mejor tiempo que el ganador de la medalla de oro, el brasileño Isaquias Queiroz (4.04.408).
La posta femenina de 4×400 cerró la actuación cubana en el atletismo.
Tras un asombrar en semifinales con 3.24.04 sin su mejor figura, se esperaba que las alumnas de Ricardo Molina podían luchar por medalla y mejorar el añejo record de Cuba.
Aunque marcaron otro buen crono de 3.26.92, a las campeonas mundiales de este año en Chorzow (Polonia) no les alcanzó para mejorar el octavo puesto en la final.
Se extrañó a Roxana Gómez, lesionada el viernes, pero Zurian Hechavarría, Rose Mary Almanza, Sahily Diago y Lisneidy Veitía mostraron que el relevo cubano 4×400 tiene presente y futuro.
Con excepción de Salas, la lucha tuvo una jornada discreta, con la temprana eliminación de Yusneilys Guzmán (50 kg), mientras que en pentatlón, el medallista panamericano Lester Ders se cayó del caballo y no sumo puntos en la equitación, contratiempo que lo llevó al último puesto en la tabla sumando las cinco disciplinas.
Con la medalla de Salas, Cuba elevó su cosecha a 14 preseas (6-3-5), con lo que se ubica en el puesto 16 de la tabla de medallas, mejor que su cosecha de Rio-2016.
Este domingo, en el cierre de las competencias, la Isla tiene otra posibilidad de un séptimo oro, cuando el bailarín del ring, Andy Cruz, dispute el título en el boxeo olímpico en los 63 kg.