En los Estudios Siboney y con la participación de especialistas de la radio, la televisión, la producción discográfica y otras vertientes se iniciaron las sesiones teóricas y prácticas que dan continuidad al primero de esos cursos, realizado en mayo en La Habana con la presencia de reconocidos expertos británicos.
Omar Carralero, en representación del BC, expresó la voluntad de fomentar y fortalecer los conocimientos y las capacidades de quienes intervienen en estos procesos como eslabón esencial en la estrategia de salvaguarda de esas piezas en soporte analógico, cuya vigencia es indiscutible en la industria musical actual.
Por su parte, Vianka Rodríguez, en nombre de la principal disquera cubana ponderó la trascendencia de esta acción de superación y de coordinación para proteger esa valiosa memoria sonora del país frente a tantos intentos imperialistas por borrar el legado histórico y espiritual de los pueblos.
Gonzalo González y Juana de los Cuetos, comunicador y fundadora de la Egrem en la urbe, respectivamente, evocaron la creación de esta institución en 1980 por el Comandante de la Revolución y compositor Juan Almeida con el objetivo de promover el talento y la creación musical en el Oriente cubano.
Señalaron que cuentan con unas 675 matrices, un verdadero arsenal con piezas, autores e intérpretes emblemáticos de la música cubana, entre los cuales descuellan Eliades Ochoa, Ñico Saquito, Orquestas Original de Manzanillo y de Cándido Fabré, Harold Gramatges, Compay Segundo, Pacho Alonso y Enrique Bonne.
Remarcaron que en estos estudios graban músicos que han sido nominados y han obtenido premios Granmy Latinos como son Eliades y el Septeto Santiaguero, con los aportes imprescindibles de ingenieros de sonido, productores y grabadores que hacen maravillas con los insuficientes recursos y equipos disponibles.
Fuente. Prensa Latina