Canciller cubano rinde honores a mártires de servicio exterior

Hace 40 años, el 11 de septiembre de 1980, un miembro de la organización terrorista anticubana Omega 7 disparó en una calle de Nueva York a García, quien estaba acreditado ante la Organización de Naciones Unidas (ONU).

«Desde @CubaMINREX rendimos tributo, en el Día de los Mártires del Servicio Exterior, a su legado y a quienes perdieron la vida cumpliendo con su deber», escribió el ministro en su cuenta de Twitter.

La página del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, CubaMinrex, comparte este viernes una nota en la que se recuerda la muerte del diplomático cubano, quien venía de conmemorar, junto a compañeros chilenos, la resistencia del presidente Salvador Allende ante el golpe de Estado perpetrado siete años antes.

En esta fecha se rinde tributo no solo a él, sino a todos los funcionarios del servicio exterior que dieron sus vidas por defender a la Revolución desde esa trinchera, destaca en portada el sitio de la Cancillería.

El texto denuncia que a lo largo de estos años de diplomacia revolucionaria, el imperialismo yanqui y los grupos terroristas con base en Miami han tratado de amedrentar y volcar su odio y frustración contra los funcionarios cubanos en el exterior, y los ejemplos son varios, pues al menos siete diplomáticos han muerto por causas terroristas en el cumplimiento de su deber.

La figura de estos hombres y mujeres constituye una inspiración a conocer sobre el ejemplo de los compañeros que cayeron cumpliendo misiones diplomáticas, gran parte de ellos víctimas de actos terroristas y contrarrevolucionarios, dice la nota.

Asimismo, reitera que estas muertes no han sido en vano, pues significan un compromiso para que la diplomacia revolucionaria se prepare más y esté presta a defender la Revolución en los combates futuros por la continuidad de las ideas y del proyecto social que legó Fidel Castro.

Los ataques contra Cuba y su personal en otros países han sido varios en los últimos años, el más reciente tuvo lugar en abril pasado, cuando un hombre disparó contra la sede de la Embajada cubana en Washington, hecho que puso en peligro las vidas y la seguridad del personal de la misión diplomática y de sus familiares, y que causó daños materiales al inmueble.

Desde entonces, y en más de una ocasión, el titular de Relaciones Exteriores calificó como silencio cómplice la respuesta del Departamento de Estado de ese país ante ese hecho.

«No podría nadie olvidar la larga y cruenta historia de terrorismo contra las misiones diplomáticas de Cuba en los Estados Unidos y contra sus funcionarios», aseguró en rueda de prensa.

 Fuente. RHC, PL, ACN, Twitter / Editora. Carmen Torres

 

 

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