Entre la Sierra y el mar una periodista ilustre del Camagüey legendario

El Salón de Protocolo Nicolás Guillén, de la Plaza de la Revolución Mayor General Ignacio Agramonte Loynaz, fue el sitio  escogido para realizar dicha actividad.

Con más detalles sobre el trascendental acontecimiento les ofrecemos la siguiente entrevista:

P: ¿Qué significa para usted esta condición?

MCCV: No solamente constituye un momento emocionante y un momento de trascendencia en la vida  de cualquier  persona y sobre todo de un periodista,  sino que también es un compromiso porque cuando se me entregó esta distinción no pude dejar de pensar en muchas personas, como en mi mamá que falleció hace dos años y a quien le debo  todos los valores que poseo; por lo tanto este reconocimiento es también un agradecimiento y es un homenaje a ella.

P: ¿Quiénes considera que  han contribuido a la obtención de este resultado?

MCCV: Mi hijo, que gracias a la Revolución, estudia en una universidad, mi esposo que por más de 23 años me ha acompañado para que yo pueda asumir diferentes tareas en el ámbito profesional y también  en el político.

Y por supuesto cada compañero de trabajo que con su asesoramiento e intercambio ayudan a consolidarme aún más en mi quehacer periodístico.

P: Durante la celebración de la Jornada de la Prensa  y el acto de entrega de la condición Hijo Ilustre ha estado presente el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, ¿qué considera al respecto?

MCCV: Sí, hemos tenido un motivo muy especial para hacerlo. Creo que esta también es una de las mejores maneras que tenemos como periodistas de mantener vivo el legado de Fidel, es el compromiso con Raúl, con la patria y con nuestro proyecto social.

P: ¿Cómo valora su intervención en el momento de recibir la condición?

MCCV: Fue un momento difícil y emocionante a la vez porque tuve que hablar en nombre de todos los laureados que recibimos en la provincia de Camagüey la condición de Hijo Ilustre, y no podía dejar de pensar cuando ingresé a las filas de la Unión de Jóvenes Comunistas  (UJC) con solo 14 años  de edad,  siempre he sentido que tengo una deuda incalculable con la Revolución.

P: ¿Cuál considera qué es el papel que le corresponde desempeñar a los periodistas en la actualidad?

MCCV: En estos tiempos se tiene que abogar por un periodismo de mayor investigación, un periodismo más a tono con las preocupaciones que tiene el pueblo, un periodismo que se parezca mucho más al sentir de nuestras comunidades.

Las personas en cada Consejo Popular deben sentir que estamos reflejando lo que a ellos les preocupa y para eso es necesario prepararse mucho mejor. Para enfrentar los retos que tiene ante sí la Revolución y defenderla, hoy no se puede hacer un periodismo improvisado.

P: ¿Fortalecerá esta condición el quehacer periodístico de María del Carmen Castañeda Varona en lo adelante?

MCCV: Por supuesto, es un reconocimiento que me enorgullece pero a la vez me reafirma que debo continuar haciendo cada día las cosas mejores, proponiéndome metas superiores y ante cada adversidad ser más creativa en función de ofrecerle a nuestros oyentes un producto radial de mayor calidad.

Recibir esta condición de Hijo Ilustre a los 49 años de edad es gratificar por encima de cualquier cosa la fidelidad a todo lo que he aprendido a lo largo de todos estos años, y a la eterna condición que siempre tendré con mi Camagüey y sobre todo con Sierra de Cubitas donde me he formado la mayor parte de mi vida  como periodista, profesión que tanto me retribuye y me compromete con la historia de la nación cubana. 

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