El diplomático caribeño declaró también que contra Venezuela se fragua una conjura internacional cuya punta de lanza es la Organización de Estados Americanos (OEA).
Este hecho demuestra una vez más que la OEA está de espaldas a los pueblos y sirve de coartada a los intereses de Washington, agregó.
La OEA no utilizó la Carta Democrática contra el gobierno golpista que en abril de 2002 sacó del poder por breve tiempo al presidente Hugo Chávez Frías, electo democráticamente por su pueblo, advirtió.
Por esta razón, Cuba no volverá jamás a esa institución, dijo, de donde fue expulsada en 1962. Al respecto, defendió el derecho de Venezuela a proseguir la obra de justicia social emprendida por el presidente Hugo Chávez y continuada hasta hoy, sin interferencias extranjeras en sus asuntos internos.
Al decir de Rodríguez, la situación política en el continente amerita de la unidad de los pueblos y las fuerzas progresistas, pues se vive una ofensiva de derechas que pone en peligro los logros de casi dos décadas de lucha política, económica y cultural.
En la declaración final, el consejo político del ALBA mostró su solidaridad con la República Bolivariana de Venezuela ante los ataques imperiales de la derecha, que pretenden derrocar al Gobierno de Nicolás Maduro mediante una intervención extranjera.
La canciller bolivariana Delcy Rodríguez, aseguró que «durante el encuentro se dio una declaración extraordinaria de respaldo al presidente Nicolás Maduro, de respaldo al gobierno de Venezuela, al pueblo de Venezuela que hoy está siendo sujeto y víctima de una terrible campaña de desprestigio sin control».
La Ministra de Relaciones Exteriores de Venezuela denunció que «su país es víctima de una agresión imperial permanente, orquestada por la derecha, los medios de comunicación y las transnacionales, que se encargan de denigrar al gobierno».
«Estamos en presencia de una arremetida contra nuestros pueblos», aseveró Delcy Rodríguez.
Por su parte, el Jefe de la diplomacia de Ecuador, Guillaume Long, destacó «la absoluta solidaridad de su país con el gobierno y el pueblo de Venezuela», y denunció «cualquier intento por mermar su soberanía, por intervenir en sus asuntos domésticos».
Long también habló sobre «el rol nefasto que han jugado los medios de comunicación frente al triunfo de proyectos políticos progresistas, revolucionarios, constituyentes».
El ALBA nació el 14 de diciembre de 2004 como una iniciativa del presidente Hugo Chávez y el líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, como una alternativa de izquierdas al Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) propuesta por Estados Unidos.
En los siguientes años se sumaron Nicaragua, Ecuador, Bolivia, Dominica, Santa Lucía, Granada, San Vicente y las Granadinas, Antigua y Barbuda y San Cristóbal y Nieves, hasta llegar a los 11 países que integran este bloque.
Fuentes: Radio Rebelde, Prensa Latina y TeleSur.