Raúl Boschmonar: un testigo de lujo

Ya en 1960, con 23 años de edad, en los antiguos estudios Pumarejo (quien ya no estaba en Cuba; sus estudios radicaban en calle Prado al Parque Central) se había iniciado colaborando en la televisión como periodista (sin cobrar un centavo) del espacio informativo El pueblo pregunta, del Canal 2, donde entrevistaba a políticos, literatos y otras personalidades, por lo que se le reconocería junto a un buen grupo de compañeros, como Fundador del Instituto Cubano de Radio y Televisión (Icrt); luego se extendió al Instituto Cubano de Artes e Industrias Cinematográficos (Icaic).

En 1980 comenzó en Radio Ciudad de La Habana como periodista de la Unión de Periodistas de Cuba (Upec), y es cuando ingresa en la referida sección de la Uneac en fecha tan temprana como en 1982, cuando se estaba creando tal sección, entre los años 1982 y 1983, y no tardó en ser jurado de radio varias veces y de su emblemático y ya hoy tradicional, concurso Caracol, y en el Premio de Crítica otras pocas; ha competido sobre todo en radio y en periodismo. Presidió la sección en época difícil (1993) pues su presidente electo en Congreso (Arturo Arias) se había marchado de Cuba.

En efecto: de inmediato y activamente protagonizó en los Caracoles mientras la sección se estrenaba, presidida entonces por Mario Rodríguez Alemán y con Juana García Abas como vicepresidenta, lo que ella continuaría cuando Enrique González Manet sustituyó a Mario en la presidencia, tras su fallecimiento.

Boschmonar trabajó entonces con Soledad Cruz, Ilse Bulit, Jorge Calderón, Omar Vázquez, Julio Batista, Lourdes Pasalodos, Paquita Armas, entre otros fundadores. Paralelamente surgió la Asociación como tal (antes se llamaba Sección), presidida por Pepe Massip y luego por Lisette Vila, y fue cuando se designó a Arturo Arias presidente de esa sección de Críticos, y a él (Boschmonar) su vicepresidente. En 1992 Arias salió del país, y Lisette le propuso a Boschmonar asumir la presidencia de la Sección al menos hasta el Congreso; por lo que la presidió por dos años de pocas actividades pues el Periodo Especial no permitía económicamente proyectos de importancia.

Colaboraba en lo posible en aquellos Caracoles, sobre todo promoviéndolos, como periodista. Moderó una conferencia de prensa en la que presentó a Titón y a varios cineastas más. En los jurados recuerda que trabajó con personalidades que ya no nos acompañan, como Isabel Aida Rodríguez y Elizabeth Díaz, y otros que sí están con nosotros compartiendo saberes, como Pedro Martínez Pires, Colina, o Julio Batista.

De su trabajo en el Premio Caracol, de los años aproximadamente 1985-1987, recuerda sus loables resultados, prácticamente congresos con participación internacional, lo que, aun ajustándose a un número relativamente reducido de invitados, les daba un brillo extraordinario; por lo general un buen nivel de organización, a pesar de que eran muy abarcadores: no eran solamente temas específicos al cual los participantes tuvieran que limitarse.

Trabajando Boschmonar en ellos había, por ejemplo, conferencias interesantísimas por personalidades internacionales que nos visitaban, con los más importantes salones del hotel Habana Libre dedicados al Caracol, donde el evento radicó más de una vez, lo cual enriquecía con suntuosidad a aquello que “era de hecho un espectáculo; había que controlar muy bien las credenciales, porque ahí sí quería ir todo el mundo dentro de nuestro medio”

Boschmonar ha participado en los Caracoles más recientemente, y no solo como público; también ha integrado la mesa de la presidencia, y cuando José Ramón Artigas estaba al frente de la asociación, presidió un panel acompañado por Ilse Bulit y Brunito Suárez: se completaba así con tres figuras descoyantes de la radio.

Durante varios años integró el Buró de Prensa de eventos de la UNEAC, y no solo del Caracol, que para él era el principal, sino también eventos de la Asociación de Músicos (que se hacían en el Hotel Nacional), y tal vez alguno de Artes Plásticas y de Artes Escénicas; aun rememora las presidencias de Evelio Tieles, José Loyola y Aurora Bosch, y Divulgación con Joaquín G. Santana (el Secretario Ejecutivo era Armando Cristóbal) y en los Buros de Prensa con Luis Beiro, y Fidelito Horta.

Trabajó muy vinculado a Radio Metropolitana y 17 años en Radio Taíno, donde fundó su espacio Conversando; su nombre descuella actualmente en tres programas en Habana Radio, donde continúa como (director, conductor, guionista de la revista Parece que fue ayer, para adultos mayores); Encuentros, con grabaciones, como, por ejemplo, las entrevistas que heredó de Orlando Castellanos, sobre todo fuera de Cuba a militares, intelectuales y otros. No en balde, en el año 2018, Habana Radio lo nominó al Premio Nacional de Radio.

Acumula más de 40 años de crítica de radio y TV, e investigación en sentido general. Ya en el siglo XXI ganó Mención en el Premio de la Crítica.

Artista de Mérito del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT) y Micrófono de la Radio, ostenta asimismo la Distinción Raúl Gómez García que otorga el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Cultura, y varios reconocimientos periodísticos.

La sección de la que es miembro en la Uneac, lo incluyó a fines de 2019 entre los diez primeros reconocidos con el Diploma José Manuel Valdés Rodríguez, por su obra de toda la vida, que desde, en y hacia la radio, ha sabido extender.

Autor