Múltiples actividades conforman el programa de celebración de estas cuatro décadas de la emisora que transmite su señal en los 1450 de la AM y los 95 punto 9 de la FM hacia el sureste habanero.
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Se incluyen talleres de realización radial, géneros, el sonido, propaganda, seguridad informática, investigaciones de audiencia para saber el impacto de la programación, entre otros que matizan las formas de superación del colectivo.
Habrá un reencuentro con los fundadores y la Gala político-cultural el propio 19 de abril, coincidiendo con la celebración del aniversario 40 de Radio Güines.
El diálogo permanente con la audiencia en recorridos de trabajo por los territorios que cubre la señal (Melena del Sur, San Nicolás, Batabanó, Nueva Paz y Güines, la sede), también aproxima el destinatario para saber sus impresiones, expectativas de lo que quieren refleje la emisora, y así le tomamos el pulso a estas pequeñas comarcas.
Los que hacemos radio en el sureste habanero escribimos de casi todo, hablamos con muchísimas personas con una rica vida para contar; otras, anónimas, que convertimos en historias sonoras, para así reflejar la realidad de nuestros pueblos de provincia, porque como dijo Tallet “la poesía está en todas partes”.
Se sabe que la celeridad y la brevedad son dos características básicas de este medio de comunicación. Se trata de informar o entretener, pero no aburrir, por lo que intenta otorgar dinamismo a los contenidos de cada una de las realizaciones con el sello de lo atractivo, para que lo que se escuche quede como una escenografía bien detallada en la mente de los oyentes. Una gran pantalla, de la que hablaba Orson Wells.
La máxima es darlo todo en el diario, ser profesional a cada hora, hacer programas con fuerza y color, capaz de seducir a la audiencia, ponerla a reflexionar y a formarse su propio juicio del mundo.
Porque comparado con los otros medios de comunicación social, se dice que cuenta la noticia, mientras que la televisión la enseña y el periódico la analiza.
Pero también afirman los especialistas en el tema que en el campo de batalla de la información la radio es la guerrilla, anda en todas partes con facilidad de maniobra, gran movilidad y ligera impedimenta.
La radio comunitaria no quiere ser más que eso: una puerta abierta al entorno en un confluir de sonidos, palabras, silencios. Por eso aspiramos a escribir cada historia en el mismo instante de su acontecer, interpretarlas y discutirlas en caliente, dándoles riquezas y tratar de hacerlas inolvidables.
Entonces Radio Güines seguirá hablando de todo y con todos los que al despertar encuentran esta aliada incondicional. Porque la radio, esa que muchos eruditos veían su fin con la invasión de las imágenes, es un medio con futuro.