Ileana-Miami: Sin patria pero con amo

Así lo notificó durante una entrevista que concedió a Patricia Mazzei, reportera del citado diario.  Esta última la caracterizó así: decana del grupo legislativo de la Florida, primera cubanoamericana elegida al Congreso.

Le faltó decir que, llegando al Capitolio, a fines de los años 80 del siglo XX, se transformó en «madrina» del terrorista de origen cubano Orlando Bosch Ávila. 

Eran tan graves los delitos de este último, que hasta el Departamento de Justicia trataba entonces de expulsarlo de Estados Unidos.

Sin embargo, Ileana movió todas sus influencias hasta lograr que el presidente  George Bush (padre) decidiera liberarlo. Adicta a relacionarse con terroristas, más tarde participó en un ruidoso homenaje que junto a Bosch organizó en Miami a otro connotado asesino, Luis Posada Carriles.

Los dos estuvieron presos en Caracas debido a que se les probó su implicación en el sabotaje a un avión civil cubano donde el 6 de octubre de 1976 perecieron 73 personas. Sin embargo, ello solo constituye una de las múltiples salvajadas que los arrinconan.

Hasta The New York Times se vio precisado a revelar una parte de estas, como la organización de una red terrorista en esa parte del mundo. Pero ahora la señora Lehtinen declaró, luego de anticipar su retiro en 2018, que es hora de seguir adelante después de 38 años en cargos públicos.

«Ha sido un placer y un gran honor servir a nuestra comunidad durante tantos años y ayudar a los electores», dijo al Miami Herald.

Su entrevistadora, Patricia Mazzei, opinó que su retiro brinda oportunidad a los demócratas de conseguir en 2018 un escaño por el sur de la Florida para el Congreso federal.

Agregó que Ileana, 64 años de edad, fue elegida el pasado mes de noviembre por el Distrito 27 de Florida, donde Hillary Clinton venció a Trump con una diferencia de 20 puntos. Pero también, el lugar que presenció la derrota del candidato demócrata Scott  Fuhrman, quien se postulaba por primera vez.

Al respecto comentó Mazzei, esta última fue la elección más cerrada en varios años, hasta el extremo de que Ros-Lehtinen se vio forzada a invertir todos sus fondos de campañas (tres millones 400 mil dólares).

También intentó aclarar que no se retira del Congreso debido a sus diferencias con el presidente Donald Trump o con el liderazgo en la Cámara de Representantes.

Ros-Lehtinen, quien dijo que no votó por Trump el año pasado, estuvo en desacuerdo, entre otros, con el caso de los homosexuales y las reducciones de presupuesto.

Ella fue elegida por primera vez al Congreso en 1989 después de siete años en la Legislatura de la Florida. Declaró que los republicanos tengan el control de la Casa Blanca, la Cámara y el Senado, «me da la oportunidad de destacarme más», expresó.

Para asombro de muchos se atrevió a decir: «la gente se ha dado cuenta que soy una moderada».

Su esposo y ex jefe de campañas electorales, Dexter Lehtinen, aseguró que desean evitar la manida declaración de retirarse para estar más tiempo con la familia.

Horas después pareció contradecirse al manifestar a periodistas:  «Pero pienso que esa es probablemente la mayor razón de su retiro».

Hace sólo cuatro semanas, Lehtinen dijo que su esposa estaba preparada para una «campaña vigorosa» el próximo año. Incluso antes del anuncio de su retiro, demócratas de nivel nacional reclutaban candidatos para postularlos el año que viene contra Ileana.

¿Acaso episodios aislados o la revelación de cómo siempre se han comportado ella y otros políticos de la Florida y Washington?

Uno de ellos, Mario Díaz-Balart, quien tuvo dificultades en aclarar el origen de fondos para sus campañas electorales, aseveró al conocer el retiro de Ileana:

«Ella es uno de los legisladores más queridos y admirados», durante casi cuatro décadas ha servido a nuestra «comunidad con honor e integridad».

Y añadió: De una punta del globo a la otra, «ha sido incansable en la defensa de los derechos humanos y la democracia». Asimismo puntualizó, «ella es parte de mi familia y la voy a extrañar mucho en el Congreso».

En el año 2012 escribí un libro sobre ella: Caen los velos, Ileana Ros-Lehtinen.

Una de las imágenes que contiene la reflejan abrazada al terrorista Orlando Bosch Ávila, y su dedicatoria dice: «para Orlando, con mucho cariño, Ileana».

He ahí la síntesis de quien a los ocho años de edad, y bajo el nombre de Lily, fue sacada de La Habana y trasladada a Miami. Hasta mostrar hoy una vida sin patria, … pero con amo.

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