Los médicos cubanos y el regreso a casa

Ello muestra la intención de Cuba de garantizar una migración ordenada y controlada, para romper totalmente el diferendo en Política Migratoria entre los gobiernos de Cuba y Estados Unidos.

La derogación del Programa Parole y de la política Pies-Secos, Pies-Mojados el pasado 12 de enero por el ex-Presidente Barack Obama, impide en este instante la entrada de cubanos a territorio estadounidense sin sufrir los vejámenes de un indocumentado en ese país, salvo que sea un proceso de reunificación familiar.

El nuevo escenario hará posible que centenares de médicos cubanos que quedaron a la espera del procesamiento de solicitud de refugio en terceros países y esperaban el visado norteamericano, en la mayoría de las veces en condiciones precarias, puedan volver a su tierra natal y continuar con sus labores. A los profesionales de la salud se les ha permitido retornar a la Isla ya desde el año 2014, de acuerdo con las regulaciones migratorias vigentes.

El gobierno cubano emitió, este jueves, una información en la que precisaba la disposición de recibir y reincorporar al Sistema Nacional de Salud del país a todos los médicos nacionales que abandonaron las misiones de colaboración con el afán de llegar a los Estados Unidos.

El Ministerio de Salud Pública de Cuba precisó que los galenos podrán conservar su plaza laboral, recibir el salario íntegro y los beneficios de seguridad social. Tales medidas posibilitan la repatriación de profesionales de la salud que se encuentran en distintos países latinoamericanos como Ecuador, Honduras, Nicaragua, El Salvador, Panamá, Colombia y México.

La ruta migratoria para acceder ilegalmente a EE.UU.

Actualmente en más de 60 países unos 50 mil trabajadores de la salud prestan servicios con profunda vocación humanista y solidaria, capaces de adaptarse a difíciles condiciones. A estos se les garantiza una atención integral, estipendio, cuidado de su salud, alimentación, alojamiento y transportación aérea y terrestre.

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