¿Por qué Cuba defiende los derechos humanos? (+Audio)

Cuba, como país fundador, ingresó al órgano de 47 países en 2006 hasta 2009, momento en que fue reelecta por otro período de tres años. A partir del límite de dos mandatos consecutivos, la Isla retornó al Consejo para la etapa 2014-2016.

Con la reelección ocurrida este viernes, para el período 2017-2019, la mayor de las Antillas ganó uno de los escaños destinados a la región de América Latina y el Caribe, siendo el país más votado entre las candidaturas de esta área geográfica.

Hace una década, en el año 2006, el Consejo sustituyó a la Comisión de Derechos Humanos, cuestionada por sus manipulaciones y críticas selectivas contra naciones en desarrollo.

Según fuentes diplomáticas, en su candidatura al Consejo de Derechos Humanos, Cuba subrayó su compromiso de seguir trabajando a favor de que todas las personas en el planeta disfruten de los derechos humanos, sobre la base del respeto a la Carta de la Organización de Naciones Unidas.

La pequeña isla caribeña participó en las negociaciones que llevaron al surgimiento de este órgano de la ONU, hace diez años, con propuestas dirigidas a garantizar su existencia como un foro para el diálogo y la cooperación en el sector, alejado de las prácticas discriminatorias.

El tema de los derechos humanos es una materia donde Occidente realiza tradicionales campañas mediáticas en contra de países soberanos como Cuba; por ello, las autoridades de la Isla insisten en el reclamo de que el Consejo no debe regresar a las prácticas de manipulación y selectividad que llevaron al descrédito de la extinta Comisión de Derechos Humanos.

Ciertamente, Cuba expone sus logros en la promoción y protección de todos los derechos humanos, no sólo de su pueblo, sino de pueblos de numerosas naciones del mundo, con las que ha cooperado en esferas como la salud y la educación.

A pesar de sus carencias y dificultades, el país ha contribuido a la realización de los derechos humanos de otros pueblos del orbe.

La Isla impulsó el proyecto de cooperación conocido como «Operación Milagro», que ha realizado cirugías oftalmológicas gratuitas a 3,4 millones de personas de 34 países.

Asimismo, se han graduado 9 millones de personas del programa de alfabetización “Yo sí puedo”; y un millón 113 mil del programa de continuidad «Yo sí puedo seguir».

Hoy, más de 51 mil cooperantes de la salud cubanos prestan servicios en 67 países del mundo. No podemos olvidar que más de 250 colaboradores de la salud voluntarios y especializados de la Brigada Médica «Henry Reeve», partieron a combatir el virus del ébola en África, en las regiones más afectadas. Otros 4 mil cooperantes de la salud colaboran en el programa de prevención en una treintena de países africanos.

En medio de estas contribuciones a los estados de América Latina, el Caribe, África, y otras partes del mundo, Cuba continúa enfrentando la política de bloqueo que durante más de 50 años le ha impuesto el Gobierno de Estados Unidos, lo que constituye una violación grave y sistemática de los derechos humanos del pueblo cubano.

Pero Cuba no se detiene. Hoy se trabaja en la actualización del modelo económico, sobre la base de la justicia social.

Todos los cubanos acceden sin discriminación a la prestación de servicios básicos de calidad como la educación, la salud, la asistencia y la seguridad social.

Cuba cuenta con indicadores de salud similares a los de los países desarrollados. La educación tiene carácter universal y es gratuita en todos los niveles de enseñanza.

Pero, también la Isla exhibe un amplio historial en materia de cooperación con todos los mecanismos de derechos humanos que se aplican sobre bases universales y no discriminatorias.

Cuba ha ratificado 43 instrumentos internacionales en materia de derechos humanos. La elección del país como miembro del Consejo de Derechos Humanos para el período 2017-2019 demuestra el prestigio alcanzado por el país en este ámbito.

En el complejo escenario global, las cifras son alarmantes: 842 millones de personas padecen hambre en el mundo; 774 millones de analfabetos adultos y 6 millones de niños mueren cada año por enfermedades prevenibles.

Ellos, como resultado de un orden internacional excluyente, injusto y desigual, no forman parte de la particular visión de los países del Norte sobre los derechos humanos y las libertades fundamentales.

Entretanto, Cuba sigue comprometida con una genuina cooperación internacional sustentada en la indivisibilidad de los derechos humanos, la no selectividad y la no politización.

Los representantes del Gobierno en la Isla han ratificado que la nación continuará comprometida con la lucha por establecer un orden internacional más justo, democrático y equitativo que elimine los obstáculos a los esfuerzos nacionales para la realización de todos los derechos humanos.

Cuba mantiene además, un alto nivel de cooperación e interacción con los procedimientos y mecanismos de Naciones Unidas en derechos humanos de aplicación universal y un diálogo positivo con los órganos creados en virtud de tratados internacionales.

Cuba conquistó hace más de medio siglo uno de los mayores derechos humanos: el pleno ejercicio por el pueblo de su derecho a la libre determinación en medio de amenazas, hostilidades y de los graves obstáculos derivados de la política bloqueo impuesta durante décadas desde Estados Unidos.

Escuche el comentario en voz de la periodista Angélica Paredes López, de Radio Rebelde:

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