Además de eliminar a 800 grupos de QAnon, siguiendo la ampliación de la política de la compañía sobre comunidades que considera que representan riesgos, la red social más grande del mundo impuso restricciones a los 1 950 grupos públicos y privados restantes de QAnon que pudo encontrar.
Además de eliminar 790 grupos y 100 páginas vinculados a Qanon, la compañía informó este miércoles que también bloqueó 300 etiquetas de QAnon y desactivó 1 500 anuncios relacionados.
En total, la compañía ha identificado a otros 1 950 grupos y 440 páginas en Facebook y más de 10 000 cuentas de Instagram vinculadas con QAnon, que serán restringidas y están pendientes de revisión para ser removidas. “Que un grupo o página no haya sido eliminado, no significa que no lo vaya a ser pronto”, advirtió un vocero de la compañía.
Según la información, Facebook aún permitirá a usuarios publicar contenido de apoyo a QAnon en esos grupos restantes, pero “restringirá su capacidad de organización” en la plataforma sacándolos de los algoritmos de recomendaciones, reduciendo su ranking en feeds de noticias y resultados de búsqueda, e impidiéndoles usar herramientas para recaudar fondos o colocar anuncios.
Las restricciones implican que Facebook ya no recomienda esos grupos a sus usuarios y hace que sea menos probable que los descubran en las búsquedas.
Al menos cientos de miles de usuarios de Facebook pertenecen a uno o más grupos de QAnon, aunque Facebook se negó a dar cifras más precisas.
Los esperados retiros se producen en medio de críticas sostenidas, ya que la actividad de QAnon en Facebook ha aumentado durante este año a la par de su mayor relevancia en el terreno político estadounidense.
Un partidario de QAnon ganó la semana pasada las primarias legislativas republicanas en un distrito conservador de Georgia, lo que recibió elogios del presidente Donald Trump.
Cuando se le preguntó públicamente sobre las creencias de QAnon, el presidente de EE.UU. señaló que no los culparía.
Twitter había eliminado anteriormente cientos de cuentas de QAnon.
(Con información de Reuters y The Guardian)