Yuri Batista, jefe de la brigada, en declaraciones a Prensa Latina, precisó que este domingo hasta la medianoche cuatro galenos e igual número de enfermeras apoyaron las labores de atención a los damnificados en uno de los centros de evacuación de Escuintla.
Este lunes los 27 colaboradores de la Isla que laboran en la zona se encuentran bien y permanecen dando cobertura de salud en sus comunidades y hospitales, pero alertas para asumir cualquier ayuda que solicite el Ministerio de Salud guatemalteco.
La Embajada de Cuba en esa nación reiteró sus sentidas condolencias al pueblo, gobierno y familiares de las víctimas y patentizó el compromiso de sus médicos de mantenerse junto a los más necesitados, como lo ha demostrado a lo largo de 20 años de presencia ininterrumpida en ese país centroamericano.
Aunque Escuintla fue el lugar más golpeado por la furia del coloso de Fuego, también los daños se hicieron sentir en Chimaltenango y Sacatepéquez, que permanecen en Estado de Calamidad Pública.
Hasta el momento, la cifra oficial de fallecidos supera las 64 personas, pero aún continúan las labores de rescate y aparecen más víctimas a medida que los socorristas consiguen entrar en aldeas cercanas al volcán que están incomunicadas bajo lava, ceniza y arena.
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