por El también miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba (PCC), cuestionó durante su intervención en la Comisión de Atención a los Servicios del VII Período de la Octava Legislatura los mecanismos dispuestos para que las resoluciones y normativas recién aprobadas sobre el funcionamiento de las cooperativas no agropecuarias y trabajadores por cuenta propia, acogidos al sistema de arrendamiento, sean conocidas por quienes deben ejecutarlas.
Sucede, dijo Lazo, que en muchos de los controles internos se detectan reiteradamente las mismas violaciones y el problema se justifica por la falta de capacitación.
Hay que capacitar, es cierto, pero hacerlo de manera diferenciada a los cuadros, trabajadores y a los diputados para que puedan ejercer mejor su función fiscalizadora, exhortó.
Refirió que después de estudiar los informes de control ejercidos por la Contraloría, tiene la impresión de que esas normas no siempre se utilizan como herramientas de dirección y de control específico y es la razón por la cual después de esmerarse en elaborarlas, se engavetan y las violan.
Entonces, subrayó, el germen de la corrupción florece allí porque al control de esas regulaciones no se le pone mente, corazón y exigencia, y los problemas nos sorprenden cuando tenemos todas las condiciones para preverlos.
Nos falta sistematicidad y eso repercute de manera negativa en la actitud de las personas, debemos identificar a quienes dominan las normas y las utilizan para delinquir, y ser capaces de ponerles freno utilizándolas nosotros como una herramienta eficaz de control, concluyó Lazo.
Mary Blanca Ortega, ministra de Comercio Interior (MINCIN), reconoció que los documentos por sí solos no van a resolver los problemas, y adujo que el talón de Aquiles del proceso de implementación y desarrollo de las cooperativas no agropecuarias es que los Grupos de Trabajo Temporal creados por acuerdo de los Consejos de la Administración Provincial, hoy no están plenamente activados.
Eso, expuso la Ministra, es una debilidad y no ganaremos esa tarea si en el territorio no intervienen de manera mancomunada la dirección de Comercio, la ONAT, Finanzas y las unidades que prestan servicios, involucradas en los cambios de conceptos de los contratos a estas nuevas formas de gestión.
Ortega también hizo referencia a las negativas consecuencias de la inactividad de los subgrupos atendidos por los vicepresidentes de los consejos de la administración, porque en la práctica son ellos quienes atienden y diseñan todo el sistema de abastecimiento del territorio, sus productores y comercializadoras.
La Ministra aseveró, además, que al atemperar las nuevas normativas que desde el mes de mayo entraron en vigor, se tuvo en cuenta las insatisfacciones de los que participan y de la población, entre ellas, quejas relacionadas con la falta de competencia de algunos elementos y su impacto en la calidad de los servicios.
Informó que entre las nuevas regulaciones está la obligación de avalar, de conjunto con el Ministerio de Educación, su competencia a algunas figuras como la del elaborador de alimentos, masajistas y reparadores de efectos electrodomésticos, entre otros, para lo cual podrán hacer en los politécnicos especializados, un examen de suficiencia, en octubre y noviembre próximos, o incorporarse a cursos de obrero calificado y técnico medio.
Hoy, enfatizó la Ministra, Comercio y Gastronomía cambia sus funciones y es el encargado de organizar la capacitación debido a la cantidad de unidades y trabajadores que abarca el cambio de gestión.