Potencialidades de industria del disco a debate de los diputados

Jorge Gómez, representante del capitalino municipio de Diez de Octubre, destacó que los géneros cultivados en el país tienen gran tradición histórica, diversidad, creatividad, lo que sumado al virtuosismo y versatilidad de los músicos e intérpretes, hacen del arte nacional un producto de probada calidad, con un alto potencial para entrar con éxito en los más exigentes mercados.

El también fundador y director del Grupo Moncada señaló, además, que aunque los creadores, agrupaciones e intérpretes cubanos no están equipados con las más sofisticadas tecnologías, los resultados artísticos superan las expectativas.

Abel Prieto, ministro de Cultura, reconoció que debido al bloqueo económico, financiero y comercial impuesto a Cuba por los Estados Unidos por casi seis décadas, «es muy difícil que nuestras empresas puedan insertarse en el mercado internacional sin generar alianzas».

Comentó que esa situación se ve agravada por el hecho de que las grandes corporaciones decisoras en la industria cultural, ven al arte como pura mercancía.

En este contexto, “es importante defender la diversidad y el mensaje de nuestra cultura fuera del país”, y “estamos en la obligación de hacerlo sin concesiones y sin distorsionar lo auténticamente cubano”, afirmó.

Prieto llamó a aprovechar las oportunidades y la cantera permanente de grandes compositores e intérpretes que pueden ser competitivos en cualquier espacio, y encontrar en el mercado del disco una fuente de ingresos.

Abel Acosta, viceministro de Cultura, también se pronunció en ese sentido al manifestar que el país debe insertarse en los circuitos y obtener beneficios.
Para ello, es necesario trazar una estrategia inteligente de promoción y de inserción en la industria de la música, apuntó Acosta.

En la actualidad, Cuba avanza en dicho sentido, y los mayores pasos se dan fundamentalmente en China, India y Rusia.

Ela Ramos Rodríguez, gerente comercial de la disquera Bis Music, señaló que entre las cuatro casas discográficas del país (Egrem, Bis Music, Colibrí y Abdala) se producen al año aproximadamente 150 títulos, aunque actualmente el atraso de la fabricación del soporte material rebasa ya los 200 materiales. Esa es de las limitaciones más grandes que tenemos, aseguró.

En un aparte con la prensa adelantó que el próximo año habrá nueva tecnología para garantizar la mejor escucha a las casas Colibrí y Abdala.

Los proyectos que llegan hoy a nuestras casas disqueras son mucho más de lo que podemos asumir, porque la producción musical en Cuba es extremadamente grande. Hay más música que capacidad real para registrarla, promoverla y comercializarla, analizó.

Reflejó que se deben afrontar proyectos cuya comercialización sea segura, debido a que son una empresa. Lo que aporta hoy la música a la economía es mínimo, porque el costo de producción es mucho más alto que lo que se ingresa. Pero hemos ido buscando vías como el comercio digital, aun cuando en Cuba no se consume mucho por esta vía. Solamente en Bis Music, aclaró, el 70 por ciento de las ventas son digitales. Esta es la opción para la música cubana en el mundo actualmente, aunque mantengamos el disco físico como posibilidad más cercana al mercado nacional.

Entre las principales dificultades para sostener la industria, detalló la antigüedad de la tecnología con la que se cuenta en los estudios de grabación, que se está mejorando con los proyectos de colaboración internacional. El próximo año se proveerán de nuevos equipos que facilitarán la calidad de la grabación, aunque se mantienen las dificultades de fabricación y la escasez de materias primas.

Fuente. ACN, Juventud Rebelde

 

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