por Reportes preliminares indican que la tormenta, la cual aún azotaba Cuba la madrugada de este martes mientras se alejaba por el Golfo de México, ha provocado fuertes lluvias en Pinar del Río, el municipio especial Isla de la Juventud, Artemisa, Mayabeque y en La Habana.
La Unión Eléctrica Nacional (UNE) confirmó la movilización de brigadas de otros territorios para comenzar la reparación de las redes eléctricas en Pinar del Río y la Isla de la Juventud, donde ese servicio sufrió afectaciones de 90 y 70 por ciento, respectivamente.
En tanto, el primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) en Pinar del Río, Julio César Rodríguez Pimentel, aseguró que hasta el momento no hay pérdidas de vidas humanas pese al impacto negativo de «Michael».
Afirmó que hay más de 400 personas evacuadas y solo 80 permanecen en centros habilitados para este fin, el resto en casas de amigos y familiares.
Señaló que aun cuando todavía no es posible contabilizar los daños, la infraestructura agrícola y las producciones sufrieron afectaciones, por ejemplo en las cubiertas de almacenes, casas de cura de tabaco, túneles donde estaban los semilleros para la próxima campaña y cultivos de hortalizas.
Rodríguez Pimentel informó que se encuentran listas las brigadas de recuperación para iniciar el trabajo en cuanto las condiciones meteorológicas lo permitan y las autoridades prosiguen con la evaluación en los lugares de mayor riesgo cercanos a las presas y zonas costeras.
También se conoció que en todas las provincias se adoptaron las medidas correspondientes, fundamentalmente el resguardo de los recursos y de la población con viviendas en zonas con peligro de inundación.
Durante esta madrugada el huracán Michael ha continuado su desplazamiento hacia el centro del golfo de México, informa el Instituto de Meteorología.
Aunque se observa mejor estructurado en las imágenes de satélite, los datos de un avión de reconocimiento indican que se mantiene con poco cambio en su intensidad.
Sus vientos máximos sostenidos son de 150 kilómetros por hora, con rachas superiores, por lo que se mantiene como huracán categoría uno en la escala Saffir-Simpson de un máximo de cinco, muy próximo a alcanzar la categoría dos. Su presión central es de 973 hectoPascal y se desplaza hacia el nortenoroeste a 19 kilómetros por hora.
A las seis de la mañana de hoy, el centro del huracán Michael se estimó en los 24.3 grados de latitud Norte y los 85.9 grados de longitud Oeste, posición que lo sitúa a unos 280 kilómetros al nortenoroeste del Cabo de San Antonio, extremo occidental de Pinar del Río.
En las próximas 12 a 24 horas este huracán continuará su avance con similar rumbo, aumentando ligeramente su velocidad de traslación y ganando más en intensidad, pudiendo convertirse en un huracán de gran intensidad en las próximas 24 horas.
Las áreas de lluvias asociadas con este fenómeno hidrometeorológico se concentran en su mayoría en las cercanías del centro, ya fuera de territorio cubano, sin embargo bandas de su circulación externa han continuado afectado el occidente de la isla.
Esta situación debe ir disminuyendo a partir de la tarde. Al paso de estas bandas de lluvia pueden ocurrir lluvias y vientos fuertes en rachas.
Los vientos continuarán su tendencia a la disminución, con el alejamiento del sistema y las áreas con vientos con fuerza de tormenta tropical. Se mantendrán sobre todo el occidente vientos de región sur entre 20 y 35 kilómetros por hora, con rachas superiores en áreas de chubascos y tormentas eléctricas.
Continuarán las marejadas con peligro para la navegación en la costa sur del occidente y en el centro del país, que serán fuertes en el litoral sur de la Isla de la Juventud y Pinar del Río. Persistirán las inundaciones costeras de ligeras a moderadas en el litoral sur de Pinar del Río y Artemisa, que irán disminuyendo a medida que se aleja este sistema.
En el litoral norte de Pinar del Río habrá marejadas que disminuirán gradualmente a oleaje en la tarde, en resto de la costa norte occidental se mantendrá el oleaje. La combinación de las precipitaciones con el efecto del mar, puede incrementar el riesgo de inundación en algunas zonas bajas no propensas a la inundación marina.
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Fuentes: ACN, Cubadebate, Granma / Editor: Conrado Vives Anias
