Pedro Martínez Pírez, un hijo ilustre del periodismo

Yaritza Moya Caballero, Presidenta de la Asamblea Municipal del Poder Popular, hizo entrega del reconocimiento durante el acto provincial por el Día de la Prensa Cubana, celebrado en el Complejo Escultórico Ernesto Che Guevara, donde reposan los restos del Guerrillero Heroico y sus compañeros caídos en Bolivia, en 1967.

Durante más de 50 años, Martínez Pírez se ha distinguido en la profesión en diferentes medios de comunicación, y llevado el mensaje político y cultural de Cuba y su Revolución a distintas partes del mundo.

El agasajado se refirió al ejemplo dado por grandes personalidades de la historia como José Martí, Fidel Castro y Ernesto Guevara, baluartes de un periodismo comprometido con su pueblo y la humanidad.

Como parte también de las actividades por el Día de la Prensa Cubana en Villa Clara el prestigioso periodista, profesor y diplomático compartió con el colectivo de la Emisora Provincial CMHW y con estudiantes de la Universidad Central Marta Abreu .

«Yo no he venido a Santa Clara, yo sigo en Santa Clara». Así comenzó Martínez Pírez, su ameno intercambio, con sus colegas de la radio.

Recordó los estrechos lazos de su familia con la Reina Radial del Centro y elogió el trabajo diario que realiza este medio de prensa para llegar al público del territorio, labor que le ha merecido numerosos reconocimientos  a lo largo de su historia.

En su encuentro con los estudiantes universitarios les habló de historias apasionantes con su sapiencia enciclopédica. Posee el don de comunicar, de hilvanar las ideas con la misma facilidad con la que un sastre experto une las piezas de un traje único.

Su vida de diplomático lo llevó por diversas partes del mundo; sin embargo, no deja de hablar del periodismo y de sus avatares en la revista OCLAE, en Prensa Latina, Juventud Rebelde, la televisión y Radio Habana Cuba (donde labora en la actualidad).

En Prensa Latina conoció a Mario Benedetti y no olvida a Oswaldo Guayasamín.

«Quiero ir a Cuba a pintar a Fidel», me dijo el destacado pintor y fui yo quien le consiguió la visa.

«Desde entonces dijo que soy el responsable de su primer viaje a la Isla después de que lo monté en un avión horriblemente viejo y lo mandé para acá».

Al Comandante lo entrevistó varias veces.

«No le gustaba que le pidieran mensaje de ocasión, lo odiaba. Una vez lo entrevisté en Nueva York, el 12 de octubre de 1979 cuando habló en la Asamblea General de las Naciones Unidas en nombre de los niños sin pan.

Le dije que habíamos sacado la cuenta del tiempo que llevaba sin ir a ese país. Enseguida preguntó: ¿cuánto tiempo? Así nos dio la entrevista. «Nosotros tenemos que ser creativos a la hora de acercarnos al entrevistado».

A lo largo de su vida combinó el magisterio con la diplomacia y el periodismo. Desde su experiencia aconseja a aprender a convivir con las épocas pero sin violar los principios éticos y darse a respetar.

«Esta carrera no es oficio, es un sacerdocio. Sin grandes conocimientos nunca seremos grandes periodistas. Los que apuestan por esta profesión se tienen que dar a respetar, conservar la ética, saber de todo, de historia, de cultura, de deporte, de política, y así hacer algo creador, hay que sentirse realizado con lo que se hace cada día. Vamos a tener siempre muchas personas que se sienten dueños de la información, pero contra esas barreras hay que seguir luchando, a mí nada me ha llevado a no sentirme bien haciendo periodismo».

Más adelante puntualizó «este es un momento muy especial de Cuba, ya no tenemos a Fidel, que siempre se sintió parte del gremio, con su respaldo incondicional. Los medios han crecido, ya no son solo la prensa escrita, la radio y la televisión, hoy nos insertamos en las redes sociales, donde hay una guerra mediática inmensa, donde tenemos que insertarnos, los periodistas cubanos estamos en una gran trinchera en la cual tenemos que contribuir al perfeccionamiento de nuestra sociedad, también con la crítica inteligente, bien hecha».

Martínez Pírez dejó enseñanzas inolvidables sobre la defensa de nuestros valores y sobre un oficio que tiene como herencia el legado de grandes hombres en esta profesión. «Tenemos la suerte que venimos de José Martí, que tenemos a Juan Gualberto Gómez, que tenemos a Fidel que tanto periodismo hizo y que siempre le prestó tanta atención a los medios, tenemos que ser capaces, como Martí en su época, ser imaginativos, creativos y sacar todo lo que hay, que son buenas y valiosas. El periodismo es bello, hermoso y hay que estar aprendiendo toda la vida», reflexionó el maestro.

Fuentes: Radio Habana Cuba, emisora CMHW.