La locución en Hispanoamérica: Un contexto institucional
La globalización exige un nuevo concepto de integración, visto éste con signo positivo. En esa necesidad se incluye la comunicación de masas en todas sus facetas, y una de las más importantes radica en la locución. Desde hace décadas el mundo tiende a la especialización y, por ende, a la unidad – no necesariamente unicidad – de sus profesionales. Las maneras de crear, hacer y decir dentro de un ámbito determinado, por muy diversas que éstas sean, generalmente dan lugar a saldos positivos de los que se benefician todos los implicados y, mejor aún, los resultados de su labor.
Agrupar a los locutores de habla hispana en un marco institucional marcado por la pluralidad y el propósito de unir voluntades, constituye uno de los más acariciados anhelos de numerosos profesionales de la palabra. Les une, en primer lugar, una comunidad lingüística enriquecida por peculiaridades regionales. Esa diversidad es la mayor riqueza, ya que a partir de ella – de lo diferente y particular – es que surgen los mejores puntos de coincidencia y la más fundamental riqueza.