Irán: lo que no dice la gran prensa

 El actual programa nuclear de Irán cuenta con varios sitios en los cuales se puede investigar, una mina de uranio, un reactor nuclear, y algunas facilidades de procesamiento de la materia prima que incluyen una planta de enriquecimiento.

 El Gobierno iraní asegura que el único objetivo de su programa es desarrollar energía nuclear con fines pacíficos, y planea generar hasta SEIS MIL- MEGAWAT de electricidad por medio de plantas nucleares.

¿Cuál es la verdad? La historia nuclear del país Persa la inició Estados Unidos. En el año 1957,  bajo el programa Átomos para la Paz se firmó un acuerdo de cooperación nuclear civil, entre Irán y el gobierno norteamericano.El Sah Mohammad Reza Palevi gobernaba Irán en ese entonces, tras el derrocamiento apoyado por la CIA de Mohammad Mosadeq en MIL NOVECIENTOS CINCUENTA Y TRES. Fuentes bien informadas aseguran que  Estados Unidos nunca se preocupó si Irán podía tener armas nucleares o NO. Claro en esos años la política del gobierno iraní era la misma de la Casa Blanca.

En 1959 se estableció el Centro de Investigación Nuclear de Teherán, manejado por la Organización de Energía Atómica de Irán  equipado con un reactor de investigación nuclear de CINCO megavatios, donado por  Estados Unidos.

La República Iraní firmó el Tratado de No Proliferación Nuclear  en  MIL NOVECIENTOS SESENTA Y OCHO y lo ratificó en MIL NOVECIENTOS SETENTA. Con la creación de la agencia atómica de Irán, el Sah planeó entonces  la construcción de hasta veintitrés  estaciones de energía nuclear en conjunto con sus amigos yankis  para el año dos mil. Por aquellos tiempos a los dueños del mundo NO se les ocurrió atacar a Irán. Estas informaciones tampoco las divulga hoy la gran prensa, a pesar que toda esta historia usted la puede encontrar en Internet.

 Después de la Revolución de MIL NOVECIENTOS SETENTA Y NUEVE, Irán informó al Organismo Internacional de Energía Atómica de sus planes para reiniciar su programa nuclear utilizando combustible de fabricación doméstica.

¿Por qué tanto temor al programa nuclear civil de Irán?

La polémica  sobre la supuesta existencia de un programa nuclear iraní de carácter militar no es otra cosa que una cortina de humo. Muy parecido al otro cuento de que si Irak tenía armas nucleares.

Lo cierto es que las grandes potencias interrumpieron su transferencia de tecnología a Irán desde la caída del Sha y la Revolución Islámica condenó el principio de la bomba atómica. Tales sospechas de occidente no son sino maniobras para aislar a un Estado que no acepta la dominación, militar y energética, de las potencias nucleares y el derecho de veto que esas mismas potencias ejercen en el Consejo de Seguridad de la ONU.

Lo que si dice la gran prensa y reitera constantemente  es que Estados Unidos sostiene a través  del  director de la CIA, León Panetta, que Irán  dispone de uranio ligeramente enriquecido en cantidad suficiente para fabricar bombas.

 Lo que no dice la gran prensa es que la afirmación del señor Pannetta es una acusación  absurda porque Irán sólo posee uranio a menos del veinte por ciento, mientras que las bombas atómicas se fabrican con uranio enriquecido al setenta e incluso al ochenta y cinco.

La RED VOLTAIRE si lo ha dicho, pero la gran prensa no, que  Irán ha propuesto convertir el Medio Oriente en una zona desnuclearizada. El proyecto, acaba de ser sometido a examen en la ONU a pesar de la violenta oposición de Israel. Pero estos planes son silenciados por las grandes cadenas de prensa

 ¿Por qué Estados Unidos necesita destruir los sueños del pueblo iraní?

Analistas y expertos políticos ofrecen la siguiente respuesta: porque después de más de treinta años del comienzo de la Revolución Islámica, Irán no desvía su rumbo, a pesar de la guerra que las grandes potencias le impusieron, así como de embargos y sanciones de todo tipo.

Irán cuestiona el orden actual de las relaciones internacionales y lucha por su independencia y la soberanía de los pueblos más pobres. Eso no gusta ni un poquito a Israel y mucho menos a los yankis. Tampoco a la gran prensa le interesa divulgar. Cómo dice uno de nuestros colegas, saque usted, sus propias conclusiones.

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