El tiempo está a favor de los pequeños

No es posible ser imparcial ante el genocidio que Estados Unidos cometió en Viet Nam, o más recientemente en Afganistán, Irak y Libia. Ni ser imparcial ante el criminal bloqueo impuesto a Cuba hace más de medio siglo. Tampoco ante la prepotencia del imperio al mantener en Guantánamo durante más de cien años, contra la voluntad del pueblo y el gobierno cubanos, una base militar y una cárcel donde se violan en forma flagrante los derechos humanos y el derecho internacional.

Al poeta salvadoreño Roque Dalton lo recordamos siempre porque en su condición de excelente periodista laboró en Radio Habana Cuba y nos habló siempre de su tierra, el Pulgarcito de América, e inspiró muchas de las canciones de su amigo, el cantautor cubano Silvio Rodríguez, autor de esa pieza antológica que sirve de título a este comentario: El tiempo está a favor de los pequeños.

Más allá de la diferencia económica y militar entre Gran Bretaña y Ecuador, la decisión anunciada este jueves por el canciller de la Revolución Ciudadana, Ricardo Patiño, sólidamente fundamentada en los principios del derecho internacional, coloca a la potencia europea en una situación difícil ante la opinión pública mundial.

El gobierno de Ecuador, que durante meses ha buscado conversaciones y diálogo sobre el tema del asilo del fundador de Wikileaks con Gran Bretaña, Suecia y Estados Unidos, propuestas que no fructificaron por una combinación de prepotencia imperial y subestimación hacia la nación andina, ha reaccionado con la dignidad que caracteriza al gobierno de la Revolución Ciudadana, y ya se anuncian reuniones de los países del ALBA y la UNASUR para el fin de semana en la ciudad portuaria de Guayaquil, la más populosa de Ecuador.

Los ocho países integrantes del ALBA y los doce de la UNASUR, se reunirán en sesiones de urgencia en la ciudad en la que en 1822 se encontraron el argentino José de San Martín y el venezolano Simón Bolívar, y muchos latinoamericanos y caribeños recuerdan la histórica frase del Libertador, quien afirmó que «los Estados Unidos parecen destinados por la providencia para plagar de miseria a la América en nombre de la libertad».

Gran Bretaña tiene ya un frente abierto con América Latina: Las Malvinas, sobre cuya posesión el gobierno británico se niega a dialogar con Argentina. Ahora se agrega este diferendo con Ecuador, y las amenazas vertidas en Londres por algunos voceros del gobierno británico en el sentido de que podrían violar la inmunidad diplomática penetrando en la embajada de Ecuador, han recibido un amplio rechazo en Nuestra América, el cual puede incrementarse a nivel mundial en la medida en que Londres mantenga sus posiciones de fuerza en violación del derecho internacional.

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