Negro es blanco y viceversa
No es para asombrarse, lamentablemente ya estamos acostumbrados a sentir gran repugnancia y desprecio por los grandes medios de comunicación que siguen, con esmero, los guiones establecidos por el amo imperial y otros súbditos como el Parlamento Europeo. Claro, no se trata de guiones (es), es un único guión que funciona como madre de otros; o dígase también: es la mentira y la distorsión arropadas con atuendos simuladores de gran prensa que ocupan lujosos edificios en grandes urbes como Washington, Madrid, París entre otras.