Cuba enfrenta los estragos de la COVID-19, y de otros huracanes

Otros números de interés ofreció el experto, quien comentó que en los últimos quince días han sido diagnosticados en el país 116 125 casos positivos a la COVID-19, para una tasa de incidencia de la enfermedad de 1 038,1 por cada cien mil habitantes. Según detalló, las provincias que en tal sentido mantienen el indicador más elevado son las de Cienfuegos, Pinar del Río, Mayabeque, Sancti Spíritus, Ciego de Ávila, Artemisa, y Camagüey.

El doctor también informó que el país acumula, desde los primeros días de la epidemia hasta hoy, 5 617 fallecidos a causa de la COVID-19, para una letalidad de 0,82 por ciento.

El número de casos activos reportados al cierre de este viernes creció en un 2,1 por ciento en relación con el día anterior. A propósito de esa cifra dada en la reunión, el Presidente Díaz-Canel Bermúdez dijo: «Habíamos tenido la mejor semana de los últimos dos meses, y ayer fue un día de retroceso».

Seguidamente insistió en la idea —expresada por él en otros momentos— de gestionar mejor las altas hospitalarias, en tanto esa es la garantía de tener holgura de eficacia en el sistema de Salud.

Sobre las medidas que se han venido implementando a lo largo de la Isla con miras a reducir la epidemia, el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, resaltó la importancia de que cada territorio actúe sin improvisar ni dar bandazos en los modos de prevenir y controlar la COVID-19. A modo de ejemplo habló de cómo en algunos lugares se han cerrado instalaciones que podían seguir dando servicios de comida para llevar. No seguir abiertos para el consumo en un centro, dijo, significó para muchos el cierre total; y eso no es lo que se quiere.

La disponibilidad de oxígeno medicinal, la situación electroenergética en el país, y cómo marcha la recuperación en los territorios afectados tras el paso del huracán Ida, fueron otros temas analizados durante la reunión que, a través de video conferencia, hizo posible el intercambio con las autoridades de todas las provincias y del municipio especial Isla de la Juventud.

Desde las provincias de Pinar del Río, de Artemisa, así como desde el municipio especial Isla de la Juventud, las autoridades informaron sobre las acciones que allí se emprenden tras el paso del huracán. En la tierra más occidental de Cuba, por ejemplo, ya el servicio eléctrico —en el cual fueron afectados más de 130 000 clientes— fue restablecido. De igual manera se sigue trabajando en las viviendas que sufrieron daños, las cuales se concentran en los municipios de La Palma, Los Palacios y Viñales. Y otro tanto se hace en la agricultura, donde se cosechó todo lo posible y se hacen los preparativos con vistas a la próxima campaña de siembra.

Artemisa da continuidad a sus labores recuperativas, especialmente en los ámbitos de la energía eléctrica. Quedan más de un centenar de viviendas a las que debe ser llevado ese servicio. Y en lo referente al abasto de agua, todas las afectaciones producidas por el evento climatológico fueron superadas.

En cuanto a las viviendas que sufrieron daños, es ese un asunto que se seguirá atendiendo. Y en la agricultura, donde se perdió mucho plátano, también se despliegan los esfuerzos.

En el municipio especial Isla de la Juventud la recuperación del servicio eléctrico, al momento de la reunión, estaba por encima del 96 por ciento. En cuanto a la vivienda, el 26 por ciento de los afectados habían recibido recursos que necesitan; y se supo que nuevos materiales que llegarán en breve al territorio permitirán ir resolviendo los derrumbes parciales de cubiertas.

Allí todas las estaciones de bombeo de agua están funcionando; se ha trabajado intensamente en la higienización de la ciudad. Y en cuanto a la agricultura, se superó el cien por ciento de las afectaciones de las naves avícolas; se siguen recuperando las casas de tabacos que fueron dañadas; y se labora para recuperar las máquinas de riego, rotas por el paso del huracán.

El Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, hizo hincapié en no descuidar la arista de la vivienda por ser de mucha sensibilidad para la población. Y en lo alusivo a las afectaciones en el sector agrícola, expresó: «Tenemos que sembrar, sembrar, y sembrar».

 

 

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