por Como aquella madrugada de hace 57 años, cuando los rebeldes pasaron por territorio espirtuano en su camino hacia La Habana, hoy se observa una multitud que viste los colores de la enseña nacional y del 26 de Julio para recibir al Guerrillero del Tiempo.
El rocío se levantó a la salida del sol y pareciera que la naturaleza toda llora, y quizás sea así, porque este jueves el terruño del bravo mambí Serafín Sánchez alzará su voz para hacer resonar ¡Yo soy Fidel!, ¡Fidel vive!, ¡Hasta la victoria siempre!
Y es que desde bien temprano, de todos los rincones de Sancti Spíritus han llegado miles de personas, para ratificar su apoyo NO solo a la figura del Comandante en Jefe, sino a su mayor legado: la Revolución.
En los rostros se observan las huellas de las lágrimas, marcas de estos días en que todos han sufrido por el deceso de este gran hombre que entregó su vida a la lucha revolucionaria y a la soberanía de la Isla.
Mientras, en estas horas en que el pueblo espirituano rinde tributo a la memoria de Fidel, las personas recuerdan muchas de sus palabras, acciones, gestos, anécdotas… y en ese sentir unánime, en ese duelo íntimo, se sabe que el líder indiscutible no morirá nunca y que toca a todos seguir el ejemplo de su estatura moral.
¿Qué hacer sin Fidel? ¿Qué será Cuba sin Fidel? Son preguntas que quedan atrás, porque se conoce que el Comandante en Jefe seguirá en la eternidad, seguirá vivo en el alma y corazón de cada revolucionario.
Este jueves, las calles están enardecidas por el calor humano, por el mar de gente que espera a la caravana que traslada sus cenizas hasta Santiago de Cuba, porque el pueblo honra al hombre inmortal y, aunque su deceso sea una herida que nunca sane, los espirituanos y las espirituanas le dirán a Fidel: «¡Siempre contigo, Comandante, simplemente ordene!».
Fuente: Radio Sancti Spíritus.