“Una de las actividades que más dinámica puede tener, incluso en las estrategias de desarrollo local y territorial, es la actividad de comercio”, puntualizó Díaz-Canel.
En ese sentido, consideró que “esta es una actividad que, cuando se ejerce bien, estimula producción, estimula servicios; porque es generalmente rentable, si existe control”.
El mandatario cubano enfatizó en que “si la actividad de comercio se realiza bien, satisface las necesidades de la población y, por lo tanto, puede dar proyectos muy sostenibles que ayudan al desarrollo de un territorio”.
Como parte de la construcción de un sistema de Gobierno que tiene entre sus pilares fundamentales la ciencia y la innovación, el Jefe de Estado dirigió esta sesión de trabajo con directivos del Ministerio de Comercio Interior, así como con científicos, especialistas y expertos de centros relacionados con esta esfera, como expresión de una práctica gubernamental que se ha ido extendiendo a diferentes ámbitos.
En el intercambio, realizado en el Palacio de la Revolución, la titular de esta cartera, Betsy Díaz Velázquez, definió las principales problemáticas que hoy enfrenta el sistema de comercio para aplicar la gestión de ciencia, tecnología e innovación, en correspondencia con los planes de desarrollo económico y social del país.
La Ministra de Comercio Interior precisó, entre otros aspectos, la necesaria transformación del desempeño del capital humano, lograr una eficiencia en el sistema logístico, elevar la gestión empresarial desde el punto de vista de su funcionamiento, impulsar el desarrollo de las tecnologías, la comunicación y el comercio electrónico, así como transformar los estudios de la demanda de los gustos y preferencias de los clientes.
Entre otras cuestiones que limitan el desarrollo del sector, el presidente Díaz-Canel reflexionó, puntualmente, acerca de fomentar el comercio electrónico, un asunto donde se ha avanzado en la elaboración de las plataformas que lo sostienen, pero todavía resulta ineficiente en la calidad de los servicios que presta.
A las insatisfacciones que tiene la población, de cara al sistema de comercio interior, también se refirió el Primer Ministro Manuel Marrero Cruz.
“Hay que ponerle ciencia, hay que pensar en todo lo que es desarrollo del comercio”, indicó el Jefe de Gobierno, quien destacó el papel que deben ejercer los científicos, expertos e investigadores, para “hacerlo bajo nuestras propias condiciones y características”.
Marrero Cruz afirmó que “esto es un gran reto, porque lamentablemente predomina la insatisfacción del pueblo relacionada con la calidad”.
“No solamente es ingresar por ingresar, es prestar servicios, ese es el primer concepto de esta actividad, y hay que ponerle pensamiento, sobre la base de políticas claras para lograr los objetivos que necesitamos”, valoró el Primer Ministro.
Perfeccionar el sistema de comercio interior, aplicando ciencia, tecnología e innovación, potenciando la capacitación de sus recursos humanos, fomentando el vínculo con las universidades, impulsando la informatización y estableciendo políticas nacionales para su desarrollo, es un desafío para los directivos y trabajadores del sector, en el impostergable objetivo de estimular la producción, la eficiencia y la calidad de los servicios.
También aquí, como en otros ámbitos de la economía y la sociedad, la gestión de Gobierno -basada en la ciencia y la innovación- es una necesidad que impone la urgencia de estos tiempos, pero también representa una estrategia de futuro.
Por un turismo cada vez más innovador
Elevar el impacto de la Ciencia y la Innovación en el Turismo constituye un desafío inmediato que debe enfrentar un sector considerado como estrátegico para la economía cubana. De ahí que el presidente Miguel Díaz-Canel ratificara que nuestro turismo debe ser por naturaleza un sector innovador.
Desde esta premisa se desarrolló en el Palacio de la Revolución un nuevo intercambio del Jefe de Estado, y el miembro del Buró Político y Primer Ministro Manuel Marrero Cruz, sobre los avances del sistema de Ciencia e Innovación en la llamada “industria sin chimeneas”, uno de los conceptos claves de la gestión del gobierno en el país.
La pandemia ha tenido un impacto negativo en el turismo nacional e internacional, expuso el Ministro de Turismo, Juan Carlos García Granda, quien consideró a su vez insuficiente la labor del sistema de la Ciencia, Tecnología y la Innovación en el sector, y su integración con las empresas a partir de la generalización de los resultados de investigaciones realizadas.
Un total de 11 388 trabajadores laboran en el sector turístico nacional, de ellos 35 son Doctores en Ciencias y 767 Másteres, lo que a juicio del titular del Turismo “es insuficiente desde el punto de vista de la formación del capital humano en función de la Ciencia y la Innovación y su aporte a la actividad científica”.
El presidente insistió en hacer todo lo posible en materia de innovación organizacional de los sistemas de gestión en la actividad turística, “porque hay que ponerle innovación científica a todo el banco de problemas, esta es la entidad económica más dinámica que tiene el país en estos momentos, el turismo tiene que ser innovador”.
En su intercambio con directivos, académicos y expertos, Díaz-Canel consideró imprescindible el fortalecimiento de los Consejos Técnicos Asesores, y manifestó que en el caso de este sector debe ser multidisciplinario, no solo para conformar ideas, sino además para mantener una retroalimentación constante en aras de hacerlos sostenibles y aprovechar todas sus potencialidades. “Hay que ponerle ciencia a todo, hasta lo vinculado con la calidad de los servicios”, advirtió. El mandatario dijo que “el reto está en cómo tenemos mejor calidad en los servicios y qué podemos hacer diferente a los demás”.
Entretanto, el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, consideró muy importante que el turismo pueda marchar a la vanguardia en un mundo tan competitivo que se distingue por dos elementos claves: la calidad y la comercialización que requieren ponerle más ciencia a todo lo que hacemos, en medio de las condiciones de país bloqueado “es un reto superior que lleva pensamiento”.
Asimismo se refirió a la necesidad de profundizar en estudios de las universidades vinculados con el desarrollo local y el diagnóstico territorial, que propician explotar todas las potencialidades turísticas.
El desarrollo turístico nacional y su conexión con el cuidado y protección del Medio Ambiente, la necesidad de potenciar mejor nuestro Patrimonio Cultural, las ventajas del turismo de salud, cómo podemos explotar más lo que nos distingue como país para marcar la diferencia y tributar a un turismo más eficiente y sostenible, fueron otros asuntos que marcaron los intercambios de la reunión.
En un sector competitivo como este se avecina una etapa de recuperación compleja donde, a juicio de expertos, marcará la diferencia la manera en que podamos mostrar los elementos que nos distinguen de otras naciones lo cual implica hacer algo diferente y mejor.
Actualmente la Facultad de Turismo de la Universidad de La Habana trabaja en la propuesta de un programa de formación doctoral que ha sido concebido con un carácter nacional y multidisplinario, lo que permitirá fomentar la educación académica del capital humano del sector para impulsar la introducción de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación y seguir avanzando.
Los intercambios del Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez con representantes del Ministerio de Turismo forma parte de la agenda de trabajo del gobierno para continuar fortaleciendo la Ciencia e Innovación como pilares del desarrollo, en una nación que resiste creativamente, con el acompañamiento de todas las reservas del conocimiento y la necesidad del uso cada vez más óptimo de sus recursos humanos, materiales y naturales.
*(Escrito por Angélica Paredes López y Demetrio Villaurrutia Zulueta)