Asistieron, además el presidente la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros; combatientes del Moncada; expedicionarios del Yate Granma, y Héroes de la República de Cuba y del Trabajo.
Entre el auditorio resaltaron, además, familiares de víctimas del terrorismo, trabajadores de los distintos sectores de la sociedad; miembros de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana (ACRC), de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y el Ministerio del Interior (MININT), estudiantes y representantes del cuerpo diplomático, entre otros.
Los niños de La Colmenita transmitieron la alegría que siente Cuba toda, por celebrar este 90 cumpleaños, por su obra, por su legado, por amar el futuro, por inspirar en todos la solidaridad y el amor al ser humano.
El espectáculo que ofreció la compañía La Colmenita resultó un momento cumbre de las numerosas celebraciones que hace varios meses se realizan dentro y fuera de Cuba con motivo del aniversario 90 de Fidel, considerado un símbolo de la lucha de los países del Tercer Mundo.
Un maravilloso despliegue de alegría, música y baile caracterizó la presentación de los niños y niñas, donde sobresalieron piezas emblemáticas, como «Llegó el Comandante y mandó a parar», de Carlos Puebla, y «El Necio» y «La era está pariendo un corazón», de Silvio Rodríguez, esta última interpretada magistralmente por Omara Portuondo.
El aula de una escuela, una maestra interesada en enseñar a sus alumnos las cosas esenciales de la vida, y unos infantes deseosos de aprender y compartir bellezas del alma fue el ambiente recreado entre poemas, canciones y anécdotas.
Un tributo al Apóstol José Martí, se convirtió en la celebración del «cumpleaños de su hijo predilecto», el mismo que en 1953 protagonizó junto a otros jóvenes un grupo de acciones revolucionarias para no dejar morir al prócer en el año de su centenario.
«Fidel es un amigo, un amigo bueno y un maestro, cualquier cosa que le preguntemos la va a responder, nunca va a las clases sin prepararse», expresó el Historiador de la ciudad de La Habana, Eusebio Leal.
«Conoce las cosas, lee mucho, sabe de literatura, arte, historia, de acercarse al corazón de los demás y decir siempre la verdad», agregó Leal Spengler, quien resaltó la generosidad del líder cubano: «siempre acude cuando hay una necesidad».
Una emocionante despedida con el tema Cuba qué linda es Cuba, de Eduardo Saborit, y vivas del público al líder revolucionario por su cumpleaños 90, matizaron el agasajo a quien hizo de su vida y obra paradigma de intransigencia, rebeldía, y apego a las causas justas.
Fotos: ACN y Capturas de la TV Cubana