Lógicamente con tan corta edad no sabía que solo podíamos escucharla los que habitábamos en la región más occidental de Cuba, pero debo reconocer que cuando lo descubrí, me sentí orgullosa de haber sido fiel oyente de Radio Guamá, emisora provincial, que hoy cumple 44 años de creada llevando, sin duda alguna, una programación exquisita que disfrutamos los pinareños en cada jornada.
Programas que han marcado una historia y que aun recuerdo con especial agrado Domingo AM, Fiesta en La cooperativa, La Flecha de Cobre y el Noticiero Provincial de Radio, por solo citar algunos de los espacios que verdaderamente cubren mi memoria de bellos encuentros con la Radio.
Desde Radio Guamá, se aconseja, se acompaña, se instruye, se critica, pero todo con el ánimo de hacer la vida de los pinareños más placentera. Basta con acercarse a los alrededores de la emisora para percatarnos de la retroalimentación de esta con su público, un público que llama, sugiere y disfruta cada entrega, que no puede pasar por el frente de Guamá, sin decirle al visitante: esa es nuestra emisora de Radio.
Activa en cada frente de lucha, fiel compañera en tiempos de desastres naturales cuando la única voz que se alza en todo el territorio es la de los periodistas, locutores, técnicos, sonidistas y el personal que abandona sus hogares para mantener al tanto a los vueltabajeros de las últimas noticias meteorológicas, y sin dudas, ¡se confía en Guamá!
Cuántos talentos de la región han surgido de tan nobles escenarios. Se me ocurre pensar en el inolvidable Polo Montañez, quien anduvo en los pasillos de la emisora y cantó en sus micrófonos, como en su segunda casa, porque este fue el lugar que lo vio nacer.
Radio Guamá tiene el olor del tabaco, el sabor de la dulce Guayabita del Pinar, se arrulla con la décima campesina y reverencia los mogotes de Viñales. Características que sin dudas hacen distinguirse a “la señal sonora de la familia pinareña”, y la convierte en una emisora digna de todos los vueltabajeros.