Cinco de Septiembre: La Historia

Los acontecimientos en Cienfuegos han exigido considerable investigación para arribar a conclusiones definitivas: puntos de vista subjetivos de algunos protagonistas, manipulaciones de la prensa amarillista y zonas poco exploradas por los investigadores no habían hecho posible, hasta hoy, contar con una visión más actualizada al respecto.

Orlando García Martínez es actualmente el Historiador de la ciudad de Cienfuegos, y une a esta condición la de escritor y Presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) en la provincia sureña.

Además de escritor y periodista de profesión, Andrés García Suárez es miembro también de la UNEAC.  Fue subdirector del periódico Vanguardia, en la antigua provincia de Las Villas, y regresó a su ciudad natal para desempeñar igual función cuando se fundó el periódico Cinco de Septiembre. También ha escrito para la radio espacios de información histórica y dramatizados.

Ambas personalidades tienen varios libros publicados. Unieron talento y esfuerzos para honrar este hecho histórico con un libro que lo relate y describa con la mayor objetividad.

Conocer el título de este libro publicado por Editorial Mecenas, la cantidad de capítulos y el número de páginas son aspectos que atrapan la primera curiosidad.

OGM: Se titula: «El levantamiento popular del 5 de septiembre de 1957 en la ciudad de Cienfuegos». Lo mantuvimos clásico. No quisimos darle un título poético porque lo más importante es que se trata de una investigación donde hay mucho análisis, intentando explicar hasta la mentalidad de la época, las contradicciones de aquellos hombres. No es una historia de héroes solamente, de la parte positiva; también las visiones encontradas, los conceptos de cómo debía ser la lucha contra Batista. No se divide en capítulos, sino que tiene subtítulos y cuenta con trescientas ochenta páginas.

TCR: ¿Es estrictamente cronológico?

OGM: Aunque respeta lo cronológico no necesariamente está así, ya que ensayísticamente se va hacia atrás, hacia adelante. Más bien se trata de dar los momentos cumbres en todo el proceso del alzamiento: los antecedentes, la fundación aquí del Movimiento 26 de Julio, los intentos en noviembre, en abril y mayo y después el hecho del 5. Las contradicciones, problemas que hicieron que no se dieran acciones; lo que significó el carácter nacional del alzamiento y porqué solo Cienfuegos se alza y no participan los demás. Realmente ahí está la grandeza del hecho.

TCR: ¿Abunda la narrativa aunque sea en sí una investigación académica?

OGM: Nosotros escribimos con un vuelo literario, no somos historiadores clásicos – modestia aparte – de ladrillos. Para nosotros, si el texto no tiene un vuelo literario, no importa que tengamos una información tremenda, para nosotros no tendría valor. Hemos tratado que tenga un valor en la narración. Si lo logramos o no, eso lo dirá el público.

TCR: ¿Aparecen elementos de la Crónica en este libro?

AGS: Hay elementos literarios; de crónica, no. Es más ensayístico. Nosotros hubiésemos deseado, en caso de que la Editora tuviera la posibilidad, que el libro tenga más páginas y dar más aspectos anecdóticos, incluso soltar más la imaginación, pero preferimos que primara la investigación con toda su crudeza y al mismo tiempo toda la justicia posible.

TCR: Para alguien como usted que era un niño en aquel tiempo, ¿de qué manera llegó la motivación para investigar y escribir acerca de tales hechos?

OGM: Es un libro que nace del corazón y de quizás ponerle rostro y voz a los participantes en el hecho del 5 de septiembre. A mí me motivaba mucho desde niño el hecho por lo que oía de los familiares. Me llamaba la atención de que no estaban lo suficientemente estudiados, promovidos como participantes, quizás un hecho que con su sentido popular no creo que hayan muchos en la historia de Cuba; es decir, ocupar una ciudad de la magnitud de Cienfuegos, mantenerla libre por las horas que fueran, eso denota su trascendencia.

TCR: Existen algunos malintencionados que pretenden edulcorar los tiempos del batistato; en primer lugar para confundir a las nuevas generaciones. ¿Cómo apunta para contrarrestar esos propósitos?

OGM: Después la masacre que ocurrió, son 39 cienfuegueros que mueren, y la mayoría son asesinados. Creo que en tiempos como el que vivimos cuando se trata como de endulzar el gobierno de Batista, solamente develar esa verdad y rendir homenaje a los participantes.Ahora mismo con lo que dijo Trump, ahora los pinta como ángeles, Batista era un ángel, el hijo de uno de los asesinos de Frank País que tocó el violín, su papá, era un ángel y esas son las cosas.

AGS: La prensa en otros países ha tratado de manipular hechos. Hubo un accidente desafortunado cuando se liberaron presos de Cayo Loco, dos de los militares principales de ese recinto, segundo y tercer jefes, que estaban en celdas separadas. Después del bombardeo los revolucionarios los liberan para que no los maten las propias bombas de la aviación de Batista; entonces muy eufóricos se abrazan los dos en el centro del patio, Santos Navarro y Cuadra Garrote, y en ese momento al auxiliar de uno de los dos se le fue un disparo del Springfield; entra la bala por la espalda de uno de los liberados y sale por la espalda del otro, muriendo instantáneamente. Ese hecho lo vieron todos, los batistianos y los revolucionarios, un hecho casual de la guerra, y eso lo explotó la prensa amarilla diciendo que los revolucionarios habían asesinado, cortándoles la garganta, a esos dos oficiales. Ahí vemos cómo se manipuló la información. Eso no es nuevo.

TCR: Aquel levantamiento popular, en medio de su heroísmo, de su gloria, también llenó de dolor a todo un pueblo porque la ira de la tiranía dejó un saldo cruento. ¿Qué tratamiento dieron a todo cuanto de traumático tuvo el hecho?

OGM: Tenemos información que es muy dura, digamos las autopsias, los dictámenes de los forenses el mismo día y el siguiente en las actas levantadas, los enterramientos, eso no lo pusimos porque es muy duro; ver cómo los masacraron, no era un disparo, fueron ametrallados. En el caso de José Gregorio Martínez, «El Yanqui», recibió un tiro de un francotirador; el de Pastor Sust; también, lo mismo que Juan Suárez del Villar, que muere combatiendo. Pero otros recibieron diez, doce impactos, mutilación de miembros, detalles muy dolorosos.  Para nosotros era duro, así que pensamos en la familia, los hijos, nietos, esposas. Si lo miramos para dar testimonio de lo que fue la tiranía de Batista, es contundente.

TCR: ¿Cómo les fue de complicada la investigación para luego sentarse a escribir?

OGM: Ya después de hecho nos encontramos cosas como que aparece un familiar, una foto que quizás la podemos incluir en el texto porque cualquier información nueva siempre nos llevó a meditar sobre la misma y si valía la pena, y corrimos la fecha de entrega a la Editorial. Tratamos de corroborar el hecho, lo aportadora que podría ser la información y creo que por encima de todo como investigador, como profesional, está un sentimiento que avala eso, que no lo tengo en otros textos quizás de esta manera.

Los autores del libro, de izquierda a derecha Andrés García Suárez y Orlando García Martínez.

AGS: Me alegro de que Orlandito haya explicado las cosas fundamentales. Yo te diría que el libro se trata de una investigación histórica sobre ese hecho realizada por un historiador muy acreditado en Cuba y en el extranjero, el máster Orlando García Martínez, quien tiene once libros publicados y otros inéditos, y un periodista con medio siglo de trabajo en la profesión con nueve libros publicados. Con la característica de que lo contempla todo de manera histórica, pero analítica, como te dijo él. Y en el caso mío es que soy contemporáneo con ese hecho histórico.

OGM: Es lo mejor que tiene, el trabajo conjunto de un contemporáneo con aquella fecha con alguien de una generación posterior.

AGS: Es una fusión que ha sido oportuna. Y fue importante por muchas razones, por la imagen que tengo personal de los hechos, porque los testimoniantes eran mis amigos, mis compañeros, condiscípulos, trabajadores del mismo oficio en aquella época yo era mensajero de bodega. Mi amistad con José Gregorio data de antes de la militancia en el Movimiento 26 de Julio; de cuando él era mensajero de una bodega y yo de otra, como Humberto Miguel lo era de una farmacia y otros que cayeron después. La manera en que los sobrevivientes conversan conmigo era como dos compañeros hablan de un hecho. Eso da sentimiento, subjetividad, y maduramos juntos en lo político.

OGM: Y eso da una ventaja a la hora de manejar las fuentes. Logramos conciliar las entrevistas de Andrés en 1961 y posteriormente, con la que yo hice en los 70, 80, antes y después de graduarme en la Universidad. Empiezo como profesional. Y lo mejor es que Andrés siempre ha tenido conmigo una deferencia particular, ha sido para mí un maestro. A él no le gusta decirlo, pero Andrés ha sido y es un hombre de una dimensión ética, un paradigma en el trato, el respeto, y me ha permitido que la subjetividad, que está en cualquier testimonio, la hayamos podido reducir al mínimo a la hora de utilizar la información. Por profesión se aprende a triangular, a contrastar las informaciones de las fuentes. Varias entrevistas en momentos diferentes a una misma persona nos ayudan a disminuir la subjetividad. Ha resultado muy útil este binomio que formamos.

AGS: Porque eso es académico y es testimonial, analítico, y se sacan muchas conclusiones de todo.

TCR: ¿Qué aporta en cuanto al protagonismo del pueblo de Cienfuegos aquel día?

AGS: El libro resalta que la dirección de todo el alzamiento, el jefe, fue el Movimiento 26 de Julio y no la Marina, como han reseñado publicaciones anteriores. También resalta la incorporación del pueblo de Cienfuegos. El Comandante Julio Camacho Aguilera siempre lo ha dicho: «si hay un héroe, ese es el pueblo de Cienfuegos». Y no fue solamente por uno o dos centenares de hombres que tomaron un arma, no. Fue también la viejita, la mujer, el niño que oculta a los revolucionarios para salvarles la vida. Les daban agua, ropa. Y eran gente de todas las capas sociales en entonces. Hubo compañeros que estaban en el Parque que fueron protegidos por las prostitutas de la calle Casales, que era la zona de tolerancia de la ciudad aquellos años. Les salvaron la vida a varios de ellos, los escondieron.

OGM: Los sobrevivientes del Colegio San Lorenzo pudieron salir porque fueron protegidos por los vecinos de las casas del fondo del edificio. Pudieron ser más los asesinados si gente del pueblo no los hubiese escondido para salvarles la vida. Y lo hicieron poniendo en riesgo sus propias vidas, porque a ellos también pudieron haberlos asesinado si los sorprendían. Todo aquello marcó una generación, y el pueblo creció más en su lucha contra la tiranía.

AGS: Aquello creó una división en los grupos armados de la tiranía, desde entonces Batista nunca más se pudo jactar de la unidad monolítica de sus fuerzas armadas.

OGM: Todo explica cómo en el primer aniversario, en 1959, las tumbas de los caídos estaban llenas de flores. Eso explica porqué el pueblo de Cienfuegos va todos los años en peregrinación, más allá de credos políticos, de condicionamientos, la gente sale. Es el acto de Cienfuegos más espontáneo y plural que yo he visto y se mantiene a 60 años del hecho.

AGS: Las nuevas generaciones no conocieron a los mártires, pero los quieren y respetan a través del testimonio de padres y abuelos, es una tradición cienfueguera.

OGM: Y marca lo que es un valor agregado de los cienfuegueros: el patriotismo, la entrega, el sacrificio. Yo creo que los cienfuegueros se asemejan mucho al pueblo de Santiago de Cuba en esta actitud ante la vida y sobre todo ante la justicia.

TCR: Son dos libros de la coautoría de ustedes. Uno es el ya mencionado con la historia del levantamiento. ¿Y el otro?

OGM: Hay otro libro que es a la inversa, una introducción histórica y estudios biográficos muy concisos también, aunque no son síntesis. Se titula «Los mártires del Cinco de Septiembre». En este caso están incluidos los 39 mártires de Cienfuegos, 4 de La Habana y 3 de Santa Clara.

TCR: ¿Creen que este libro pueda servir de inspiración para futuros dramatizados en radio, televisión y cine?

OGM: Yo creo que sirve para todo. La labor de creación es siempre difícil, pero como hay análisis, también ensayo, todo se hace más difícil. Aquí está combinado el trabajo del escritor, el investigador, el antropólogo, el periodista.

TCR: ¿Algo más?

OGM: Ahora nos falta el lector, el juicio del público.

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