El huracán Matthew ha demostrado que la radio es una gran familia. Es una frase que suelo escuchar con frecuencia tal vez demasiada; pero que en momentos como estos se materializa, se revela, se puede tocar.
Desde emisoras de alcance nacional como Radio Rebelde o Radio Reloj, desde casas radiales provinciales como CMKC, CMKS o Radio Angulo, desde los municipios… ha llegado la información, la orientación de las autoridades, los partes meteorológicos, las declaraciones de los evacuados.
La radio nos trae, generosa y humilde, el heroísmo cotidiano de la gente. Por el éter, y esta vez de manera excepcional, por teléfono. Sería fértil reflexionar sobre estas experiencias a posteriori, de reconocerlas. Y también sobre la necesidad de trazar una estrategia para poner al alcance de la mayoría, equipos radio receptores.
No importa si desde Santiago de Cuba, Holguín, Guantánamo; o desde Caimanera, Manuel Tames, Buenaventura, Moa, Baracoa, Maisí… Ningún lugar ha quedado lejos. Es hermoso escuchar a Cuba, sentir su latido, incluso en estas condiciones.
Cada periodista, cada locutor, cada especialista técnico ha puesto lo suyo en programaciones especiales que requieren por su extensión y multiplicidad, de mucho esfuerzo, imaginación, profesionalismo. En tres palabras: ha dado gusto.
Bárbara Argüelles Almenares, profesora e investigadora santiaguera que concluye un curso en el exterior, ha enviado un mensaje sobre cuanto significa la labor desplegada en semejantes circunstancias: «Tal vez no imaginan cuanta compañía representa estar cerca de su ciudad, su país y su gente a través de la radio (…) que he podido escuchar a través de la internet», acotó.
La Radio Cubana, constituida por casi un centenar de casas radiales, se crece. Esa red tendida y labrada durante años, ha ido conformando una cultura. Una cultura por perfeccionar, pero que ha devenida esencial en la labor de aumentar la percepción del riesgo, de preservar la vida, de aquilatar la experiencia cubana contra los desastres.
Matthew ha mordido a la Villa Primada de Baracoa, pero ya se retira del territorio nacional, del oriente. La radio lo ha seguido y lo seguirá. ¿Alguien dijo que era este un medio menor? La radio es imbatible.