Martí brilla en el fuego de nuestras antorchas

Como aquel lejano enero de 1953 en la Marcha de las Antorchas, con Fidel inspirado en Martí; como en julio de aquel mismo año con el despertar del Moncada. Así marcha hoy la juventud cubana, con su Revolución triunfal.

La actual generación de cubanas y cubanos herederos de Martí y de Fidel enfrenta con energía y madurez los desafío de una nueva época. Estamos comprometidos con el perfeccionamiento institucional de nuestra Patria; con la actualización de su modelo político, económico y social; con hacer de Cuba un país cada vez mejor donde el bienestar material y espiritual y la justicia social sean como hasta hoy una realidad en crecimiento continuado.

Las antorchas de este 28 de enero, en sus brillantes llamas expresan el SÍ a nuestra nueva Constitución martiana, fidelista y genuinamente cubana. En poco menos de un mes refrendaremos la Carta Magna de la Cuba que queremos todos al estilo de Martí y Fidel. Es la ley de leyes, guía para el camino del desarrollo económico, la continuidad de las conquistas de una lucha que va de 1868 a 1959, la profundización en la justicia social, y la consolidación de un Socialismo próspero y sostenible.

Antorchas en mano proclamamos al mundo entero que Martí sigue vigente y con él viven Fidel y su obra redentora. La juventud de hoy, junto con todo el pueblo, ratifica esa voluntad de lucha aun a pesar de los vientos insolentes provenientes del Imperio.

Reafirmamos con el fuego martiano nuestro antimperialismo; nuestra vocación latinoamericana y el irrestricto apoyo militante al gobierno y pueblo venezolanos y su Presidente constitucional y legítimo el compañero Nicolás Maduro Moros. Con nuestras antorchas donde Martí brilla en su fuego vital, aguerrido y de pensamiento profundo, va nuestra solidaridad militante al hermano pueblo de Venezuela, porque al decir del Apóstol desde 1892… “¡la hemos de querer y de admirar sin límites, porque la sangre que dio por conquistar la libertad ha continuado dándola por conservarla!(1)

Proclamamos en voz alta -haciendo nuestro su contenido-, lo escrito  por Martí con solo 28 años al periodista Fausto Teodoro de Aldrey, amigo y colega suyo, director del periódico La Opinión Nacional, de Caracas: “Deme Venezuela en qué servirla: ella tiene en mí un hijo”. (2) Este 28 de enero, día del natalicio de nuestro Héroe Nacional, expresamos no al injerencismo, al golpismo, a las patrañas del Imperio y sus lacayos. Toda la juventud cubana tiene en la hermana Venezuela millones de hijos para defenderla.

Decimos resueltamente sí a nuestro Socialismo, y al sagrado derecho que nos asiste de construir nuestro propio modelo de vida nacional; sí al internacionalismo proletario y a la solidaridad militante con todos los pueblos del mundo que luchan por la justicia y su plena soberanía.

Martí vive hoy como nunca antes y así junto a nuestro eterno Fidel proclama su ideario patriótico en las antorchas que brillan gloriosas, iluminando el Patria o Muerte irrenunciable, convencidos de la Victoria. Porque #SomosCuba, #SomosContinuidad.

“¡Es la hora del recuento, y de la marcha unida, y hemos de andar en cuadro apretado, como la plata en las raíces de los Andes!”.(3)

 

  • José Martí. Discurso en la velada de la Sociedad Literaria Hispano-americana en honor de Venezuela, 1892.
  • José Martí. Carta a Fausto Teodoro de Aldrey, propietario y director de La Opinión Nacional de Caracas,  27 de julio de 1881.
  • Ibídem.

 

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