La funcionaria refirió a la prensa local que el sitio, primero de su tipo en Cuba, revela un serio trabajo de protección de la naturaleza, sobre todo por la reforestación, y de desarrollo económico comunitario sostenible.
Azoulay enfatizó que el tipo de gestión que aprecia en la Reserva constituye un ejemplo de la resiliencia de la sociedad ante el cambio climático y de cuánto queda por hacer en el mundo en favor de la educación ambiental, en especial de las generaciones más jóvenes.
La directora general de la Unesco visitó el hotel Moka, ubicado en la comunidad Las Terrazas, el cual cumplió 25 años de creado el pasado 28 de septiembre con habitaciones remozadas, la piscina reparada y otras mejoras que permiten elevar la calidad de los servicios.
Recorrió las ruinas del cafetal Buena Vista, ubicado en una colina, suerte de mirador, a 240 metros sobre el nivel del mar.
La construcción de este sitio fue un alarde de ingeniosidad por su adaptación a la topografía y porque lejos de modificar el entorno, sus constructores buscaron soluciones magistrales para sortear los accidentes o variaciones del terreno.
Fidel Hernández Figueroa, director del Área Protegida de Recursos Manejados Sierra del Rosario, explicó que las reservas de la biosfera tienen entre sus funciones proteger los recursos genéticos, las especies, los ecosistemas y los paisajes, promover el desarrollo económico y humano sostenible, respaldar y alentar actividades de investigación.
Hernández Figueroa precisó que entre los programas de manejo de la Reserva destaca el de educación ambiental, en especial con niños de la comunidad Las Terrazas, quienes no sólo profundizan los conocimientos de la zona donde habitan, sino que también son capaces de transmitirlos a los visitantes, tanto extranjeros como cubanos.
Juan Carlos Cordero Acosta, especialista principal del Área, dijo a la Agencia Cubana de Noticias, que las reservas de la biosfera, además de contribuir a la conservación de las áreas naturales ubicadas en ellas, funcionan como laboratorios.
Al respecto, explicó que los especialistas de distintos centros de investigaciones realizan en las reservas su trabajo de campo, a tono con la política de la Unesco sobre estos sitios.
#Cuba: La directora general de la UNESCO, Audrey Azoulay, visitó la Reserva de la Biosfera, Sierra del Rosario, ubicada en Artemisa, la primera área protegida en Cuba por el organismo multinacional en 1985. Detalles en la #EmisiónEstelar del Noticiero y el @CanalCaribeCuba. pic.twitter.com/B2V67YEcyv
— NTV Estelar (@EstelarNtv) December 6, 2019
Leer más
Editora/ Carmen Torres Laffita