La cotidianidad de Tony Colarte

De adolescente fue un apasionado del baloncesto, y a la vuelta de más de seis décadas de existencia sigue interesándose por todos los eventos deportivos; además, tiene buen gusto a la hora de escuchar música.

Quien me pida que con tres palabras defina -a mi modo de ver- a Antonio Colarte Puig, sin mucho pensar diré con siete palabras: amistoso, jovial y entregado a su profesión.

Hace ya unos cuantos años que Tony, como le llamamos, abrazó el Periodismo como profesión, la cual es parte inseparable de su vida.

Desde que se graduó en 1977 en la Universidad de La Habana, trabaja en Radio Ciudad del Mar. Alienta ver cómo un profesional emprende su proyecto en un solo lugar, y es de inferir que su centro de trabajo sea para él un segundo hogar.

Cuatro décadas en el ejercicio del Periodismo es un tiempo considerable. Los años van pasando y es bueno recordar; por eso me pareció interesante que Toni nos compartiera sobre sus inicios profesionales. Su respuesta no pudo ser más evocadora, ya que en estos días hemos celebrado el centenario de un acontecimiento al que se refirió:

Recuerdo que mi primera tarea en el periodismo, fue cubrir el acto central de la provincia por el aniversario sesenta de la Revolución de Octubre, en el teatro Tomás Terry, en 1977. Posteriormente atendí los principales sectores de la economía en la provincia, como la zafra, la producción de alimentos, la construcción y el desarrollo industrial. En ese momento era el único reportero que laboraba en la emisora.

 Para un periodista cubano siempre es un orgullo encontrarse muy de cerca con alguien que tanto representa para nuestro país.

Tuve el privilegio de participar en la totalidad de las visitas realizadas por el Comandante en Jefe Fidel Castro al territorio sureño hasta la década de los 90″.

Aunque Toni trata cualquier tema de actualidad, sabemos que agricultura, ganadería y zafra le son tan familiares que podemos considerarlo un especializado en estos asuntos.

Durante todos esos años, mantuve como periodista varios programas con trabajadores de la zafra y la agricultura, como Zafra en Acción y De Sol a Sol».

Conste, para quienes nunca han escuchado Radio Ciudad del Mar -por la lejanía geográfica-, que cuando Toni Colarte menciona De Sol a Sol se refiere al primero de nuestros programas en Cuba dedicado al tema agropecuario, ya que éste comenzó en 1995 mucho antes que el de la televisión nacional.

Este De Sol a Sol -valga la digresión, por saludable- fue creado por quien escribe; el empeño que le pusimos nos tomó varios meses en el diseño.

Transcurridos pocos años alguien propuso que no era el nombre idóneo, entonces me opuse al cambio hasta que finalmente se le mantuvo.

Simpática coincidencia: un mes más tarde empezó a salir los domingos el de la televisión. Al recordar esto mi entrevistado sonríe, pues compartíamos el nombre del programa y la inconformidad cuando fue retirado del aire. En De Sol a Sol Toni se ocupa de las entrevistas, género que para él resulta preferido.

Como profesional de la radio, el género preferido por mí es la entrevista pues considero que posibilita conocer del quehacer de quienes llevan adelante el desarrollo económico, político y social del país.Sin dudas, el resto de los géneros periodísticos son imprescindibles para que el mensaje llegue de forma clara y amena a toda la radioaudiencia».

Como periodista de pura cepa, defiende el valor de la «nota informativa», madre de todos los géneros, ya que sin ella cualquiera de ellos no sería posible.

La presencia de la nota informativa es  imprescindible en cada uno de los espacios de la radio, por su inmediatez y la posibilidad de dar a conocer todo el accionar de los colectivos obreros que son los principales protagonistas de la radio.

 Dentro del quehacer informativo, y gracias a su experiencia, está convencido las muchas posibilidades que se abren cuando periodismo y radio se conjugan.

Le doy un altísimo valor a la actividad radioperiodística, pues la misma llega a gran número de personas y además en momentos difíciles como la ocurrencia de fenómenos naturales y otros desastres, la radio mantiene  a las personas informadas. Igualmente constituye un medio para elevar la cultura de las personas, al tiempo que contribuye a la recreación de las personas de todas las edades».

Al preguntarle qué representa la radio para él, se ocupa entonces de ratificar lo que muchos sabemos de este excelente profesional. Además, revela que en su profesión abarca temáticas muy diversas.

Realmente para mí la radio forma parte de toda mi vida. Ante los micrófonos, me considero un hombre afortunado porque puedo interrelacionar con otras personas. Hoy conduzco el espacio La Prensa Ante el Micrófono, donde se debate y polemiza acerca de diferentes problemas de la sociedad, la economía, los servicios o la docencia en la provincia. Junto a otros periodistas de la redacción u otros medios de prensa del territorio sureño contribuimos a elevar el conocimiento de las personas respecto a los temas que se debaten, y sugerimos soluciones a los organismos implicados en los problemas y a la propia población».

Cuando se le pregunta de anécdotas durante todos estos años en la profesión, es categórico al asumir la importancia de relacionarse con otros seres humanos.

Anécdotas relacionadas con el medio radial, son numerosas, pues he dedicado cuarenta años de mi vida a laborar en el mismo, y en todo este período he tenido la posibilidad de entrevistar a directivos del estado y el Partido, así como a trabajadores excepcionales que han aportado  conocimientos y experiencias para mi accionar en la profesión periodística.

Cuarenta años en una profesión y consagrado a ella, es un sólido aval para aconsejar a los nuevos profesionales de la prensa que ya comparten con él su labor.

En todos estos años, siempre que tengo la posibilidad de conversar con jóvenes periodistas o quienes se forman en esa profesión, los convoco a siempre ser honesto en lo que hacen, lograr que se conozca el quehacer de quienes laboran duro en todos los sectores».

Entre todos sus firmes conceptos, cuenta el de los periodistas, además de informadores, como educadores.

Los periodistas también deben erigirse como educadores dentro de la sociedad, y por ello las futuras generaciones de periodistas deben cumplir con ese legado».

Temprano, de lunes a sábado se le escucha en la revista informativa A Esta Hora, y cada día sale tras la noticia para luego ir a su mesa de redacción o al estudio de grabaciones. El periodismo es quehacer esencial en la cotidianidad de Colarte.

Autor