por Con el mérito de contar la historia de un plato tradicional de la gastronomía tunera de las últimas décadas, el documental cuenta con el testimonio de los protagonistas de la historia y del tema musical que aporta un gran valor a la sonorización del trabajo.
Además se alzó con los premios en guión y locución, así como los colaterales que entregan la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (EGREEM) y la red Iberoamericana de Realizadores Audiovisuales.
Dayron expresó que la experiencia fue magnífica, más allá de los galardones.
«Realmente fue una experiencia muy linda, una experiencia que no había tenido la posibilidad de disfrutar en eventos en los que he participado con iguales características, en provincias como Villa Clara, Sancti Spíritus y Pinar del Río».
«El Lloga in memoriam es el decano de los eventos, y por supuesto que obtener el Gran Premio de la edición 27, ha sido el mejor reconocimiento que hasta ahora he tenido desde el punto de vista de la obra que hace un realizador».
«Realmente causó sensación dentro del jurado, también como parte del debate con los concursantes. Yo creo que hasta ahora ha sido positivo reconocer no solamente la obra del documental sino el contenido que tiene».
«Fundamentalmente agradecer a la familia de Kike y Marina, que fueron quienes hicieron posible la realización, y también al compositor de la melodía Rogelio Díaz Castillo; de igual manera para Yunior Oro Paredes, el realizador de sonido que puso toda la magia sonora en el trabajo, que fue muy aplaudida por grandes musicalizadores de la radio».
Dayron Ferrada comentó que uno de los mejores momentos fue recibir el premio colateral que otorga la familia Lloga Hernández, de entre las 80 obras concursantes.
El jurado, integrado por prestigiosos profesionales del medio, resaltó el valor patrimonial que posee el documental y la exhaustiva investigación que demuestra cómo personas de pueblo pueden contribuir al empoderamiento de la cocina cubana, declarada Patrimonio Inmaterial del Mundo por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
Una de las oportunidades que ofrece el galardón es integrar el jurado de la próxima edición del certamen, que cada año desde Santiago de Cuba convoca a discutir sobre cómo se hace la radio joven en el país, y el papel que corresponde a cada especialidad en el proceso creativo.